SI
DE NUEVO [18]
Su último paseo a Puerto Colombia,
le aterró el rugido del mar.
le aterró el rugido del mar.
Si
regresara la lluvia de besos,
y
retornara el aluvión de abrazos…
Si
del sinsonte sus trinos idos...
Ya
nada es igual,
pero
me asombra
la
lluvia que moja las flores.
Me
descalzo ante su inmenso amor
si
se juntan las aguas para ser río,
y
regresan al mismo mar
donde
han nacido.
Me
gustan las nubes, ¡tan arrogantes!
Tan
de imágenes en ese alar alto y lejano.
Caballos
blancos, niños viajeros,
corazones
enredados en azules;
magnífica
esencia de un Dios vivo, /mi consuelo
Si
de nuevo en tu falda rosada,
si
otra vez en tu pecho tibio;
si
tu rosario rogando mi voz,
si
María en un lecho de rosas...
Pero
regresa una vez más la lluvia.
¿Qué
aguaceros nos esperan mañana?
Que
sean leves, ¡que no duelan tanto!
Que
la cigarra nos deje una nueva cuna
que
de a poco desaparezca entre las aguas.
Más
tu blonda cabellera regresa,
el
pálido armiño de tu piel,
el
verde claro de tus ojos…
¿Qué
miras ahora?
¿Hay
acaso un amanecer nuevo?
¿Estás
aquí, o allá, o entre las sombras?
¿Escuchas
acaso mi voz cuando te pienso?
Un
arco iris presiento a tu lado
¡Tan
bella mi niña sin sandalias!…
Tan
desnuda correteando por la rivera.
Nada
duele, ¡nada te herirá nunca más!...
Tu
pecho amantísimo de nácar
entre
un caparazón fuerte y liviano,
parece
volar,
parece
bendecir la vida siempre,
cuando
abres tus alas,
y
te descubro en el cielo.
Raquel
Rueda Bohórquez
Barranquilla,
octubre 28/13