lunes, 29 de octubre de 2018



Cierro los ojos y te veo
En el alma de un pájaro asustado.

Luego pienso:
¿Por qué tengo miedo a la soledad
Si es ahí cuando puedo tocarte?

Nada será como ayer
Pero me has regalado un hoy lleno de promesas.

Cierro los ojos para no pensar en nada...
Tu voz es la de una paloma
Que abre sus alas y cubre mi desnudez.

El miedo se encogió y se disolvió entre las sombras.

El dolor me llevó a ti y ahora soy un junco
Esperando del ave su canción
Con la orquesta de las hojas
Que se tocan al vaivén del viento.

Raquel Rueda Bohórquez
27 10 18



ERES MÚSICA


ERES MÚSICA

Todo estaba en silencio…
Regresar a la música que amo
Es como volver a nacer.

Aquí sólo escuchaba el sonido del viento
Que musitaba tu nombre
A través de la ventana.

Me siento bajo un árbol
En un bosque lleno de ti,
Y eres el ave que más canta
En la copa del árbol más grande
Con tus alas abiertas
Haciendo rondas para que te halle.

La música abre mi corazón
Lo multiplica cual hojas secas
Que bailan sones marineros
Al verso de la brisa.

¡Cuánto de ti en cada sonido!
Eres la guitarra y el violín
El tambor y el pájaro en vuelo.

Eres la esencia de lo mágico
Que me sostiene entre líneas multicolores
Que se entrelazan y visten de luz
Todo lo oscuro de mi vida.

¡Oh amado!...
Ayer estaba perdida
Pero me detuve ante el paisaje
Frené ante la música de las aves
Y el sonido del mar me llenó de ti.

¿Qué otro sonido puedo encontrar
Que llene más los vacíos?

¿Qué poema puede existir más hermoso
Que la luz del sol cubriendo la montaña
Con su reboso?

Sí, eres el pentagrama
Que más soles tiene;
Eres el sonido entre las cuerdas
Que mueven mis dedos,

¡Eres la metáfora de la guitarra
Llorando a un árbol convertido en violín!

Raquel Rueda Bohórquez
29 10 18





FUGAZ


FUGAZ

Tan hermoso que fue el sueño de tenerte,
Pero todo se va,
Todo termina un día cualquiera.

Tu poesía me abrigaba
En esos inviernos tan fríos y solitarios,
Me calentaba con la ilusión de tenerte
Aunque fuera abrazado en un verso.

¡Tan hermoso que fue saberte mío
Así fueras de las mariposas del viento
Y de las asonadas de la primavera!

Amochito... todo puede terminar
Menos las ganas de contemplar el sol
En la cuesta más sublime
Pintada en la melancolía de la tarde
Y en el ensueño de la noche.

No puedo negar que fue hermoso,
Despertó a la mujer dormida,
A la flor seca que se apagaba
En su propia soledad.

Nada volverá a ser como antes
Porque el tiempo pasa raudo,
Es como una flecha encendida
Que parte en dos el cielo
Y al instante desaparece entre la bruma.

¡Pero fue hermoso!...
Dejaste tu fragancia
Entre los juncos que pueblan
Mi total desnudez ante ti.

Raquel Rueda Bohórquez
29 10 18