LA PRIMAVERA/Chopin (24)
Para crear ésta melodía, el músico estaba feliz en medio de
un bosque lleno de flores, la primavera escribía en sus dedos con cada aroma, y
cada pájaro en vuelo...
Todo era paz a su alrededor; podía descifrar las gotas que
caían y tocaban las hojas; dejaba un silencio al verso de un ave entre el pico
abierto de sus desnudos pichones, y alargaba la sinfonía al sentir caer la
cascada; luego ese descanso y paz que un lago anunciaba, lo volvía negra y
blanca amándose, juntándose o desplegándose en la alcoba del más íntimo de sus
deseos.
Cierro los ojos y lo veo, su cabellera revuelta, no hay
tiempo para peines, no hay sentido a más nada que sea escribir música y la
primavera estaba suelta como él, parecía un caballo en libertad que con sus
patas hincadas sobre la hembra, /le invitaba el aroma de tanta belleza/, a
callar, para que sus dedos hablaran.
Chopin era un romántico, amaba el bosque, las barbas de los
árboles que se juntaban con las orquídeas, amaba la música como a la vida, de
ahí que cada una de sus composiciones nos lleve a imaginar sus mágicos momentos
de paz y soledad; fue ahí donde nació su gran obra llena de amor y
romanticismo.
Nada más inspirador que la primavera para tocar de frente al
amor y plasmarlo en un pentagrama.
Raquel Rueda Bohórquez
12 06 16