sábado, 8 de noviembre de 2014

PENSAMIENTOS DE NOVIEMBRE/14


Pensamientos de noviembre/14

Veloz como un rayo responde mi corazón a tu amor  ¿existe?, no lo sé, pero al menos abro las alas para pensar en ti sin rezongar, y me alejo, como las gaviotas por el ancho mar... 

¡Qué sabia que amanecí hoy!, dijo una cigarra chillona
Y una rana de zancas largas su lengua sacó:
¡Toma para que lleves, cansona!

Un niño sabio le pregunta a un hombre adulto:
¿Por qué me amas?
Y el hombre le dice: porque eres mi hijo.
-¡Qué raro!, creí que me amabas tan solo porque era un niño.

-¿Y tú chico tonto, a quién amas más que a mí? -pregunta una joven radiante en belleza...
-El chico no lo medita siquiera y dice: sólo a ella... A la que me parió y me trajo a la vida sin pensar siquiera en los dolores que le causaría en el camino, pero también me gustas, porque eres como una primavera para los ojos, si dejas buen aroma, no importa lo bella que seas por fuera, si sabes amar como una madre, también te amaría como a ella.

Nunca digas que un hombre abandonó a una mujer por las razones que él te dé, ¿acaso tuviste el privilegio de vivir bajo su cama?
Ni digas que la mujer es mala sólo porque te parece, pregunta a las sombras del día y a la cobija de la noche, que son quienes conocen sus verdades y mentiras.

No hay amigo más dulce que la soledad, ni enemigo más cruel que quien te alaba y luego el puñal por la espalda te clava.

Si sacamos a la incultura de la cultura, me pregunto como inculta que soy: ¿en dónde está la cultura? 

No hay santidad sin pecado, ni pecado sin santidad, el pensamiento de todos es el secreto mejor guardado, por eso me gusta la poesía, porque ella nos invita a deshojar nuestro propio árbol y escribir en sus hojas, de qué color son las espinas.

Si me dices que me quieres, ¿entonces por qué razón no giras lo que no te pertenece?
No es dinero lo que persigo, ni son caricias lo más anhelado, es tan solo que espero que llegues con una flor encendida en tus labios.

Al llegar el hijo más necio, la madre coloca la mejor sonrisa en el rostro, pero cuando se aleja, sus rodillas son un doblar de campanas... 

Cuando la fortuna nos sonríe, otra es nuestra voz, cuando el amor toca a la puerta, otro es nuestro cantar, pero cuando la salud falla, ni fortuna ni amor tienen valor 

El hombre es capaz de convertir una flor en un demonio, ¿qué culpa tienen las amapolas de su perversidad?, ¡tan lindas cuando abren al sol!, y tan tiernas cuando se abrazan en sus pétalos a esperar una noche en paz...

Poco se escucha, muy poco, el miedo, ese azote que nos vuelve pálidos sin sonrojo siquiera en el alma ni un vano temor de Dios, y me refiero a los chicos de México.

La madre nos regala una cobija tibia de lino puro desde su vientre, bordado con su propia piel, y nos arropa cuando nacemos, y al morir ahí estará para volver a cobijarnos con su inmenso amor .

No al toreo... Vivir en esas llanuras libres, es el pensamiento, pero será después de que desaparezcamos nosotros, porque el hombre es necio y así morirá... Menos mal soy mujer...

Hoy me preguntan muchas cosas, ¿cobrarán por detallar el amanecer, por el ocaso y por la noche estrellada?, puede ser, si prohíben a un anciano de 90 años dar alimento a los sin techo en Estados Unidos y hemos visto tanta iniquidad, ni te creas Sandra Padilla no estoy tan optimista, el hombre cobraría por los pedazos del corazón de Dios si pudiera atraparlo y venderlo, hasta la brisa la encarcelarán y la purificarán, será vendida en los mismos tanques, es que ahora soy vidente también ¡jajajaja!

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, noviembre/14


 

¿QUÉ ERES PARA MÍ?


¿Qué eres para mí?
Dulce poeta de mi inspiración
Poco a poco me olvidas
Y no envías ni una canción
Ni siquiera un aire de fantasías.

Tropecé contigo en la tristeza
Compañía que me trae de cabeza
Viéndote pasar como halcón herido
Riendo tan solo, ante mi descuido.

¿Qué eres para mí?
Un son de amor repetido
Estrellita azul en mi nube perdida
Sol y sombra tan solo
Repetida en un balcón sin besos
Donde las caricias mueren
Al caer de la tarde.

Y me estrellé contigo de nuevo
Cuando el llanto enrojecía mi piel
Una caricia leve, suave
Como las hojas que sueles recoger.

¿Qué eres para mí?
Te extraño cuando no estás
Me duele cuando te alejas
Y me pareces una estrella lejana
Imposible de alcanzar en medio de tanto ruido.

Raquel Rueda Bohórquez 
Barranquilla, noviembre 8/14

¿POR CUÁNTAS?

La  vieja Sheila


¿POR CUÁNTAS?

¿Por cuántas estaciones estarás en mi vida?
Es bonito, el momento de la partida no me gusta, 
Quiero que siempre estés ahí, reposado para mí, 
¿Qué te exijo?, nada, ¿qué te pido?, un segundo diario,
Pero si no puedes,
Sólo deseo que vivas hasta que mi otoño no te vea más...
Hasta que la nieve del tiempo cubra mi propio árbol
Y sea tan solo cenizas en tu recuerdo,
¿Será?, en otro poema te atraparé,
En otra primavera beberé de tu vino
Guardado en el cáliz de tu corazón...

¿Por cuántas estaciones estarás en mi vida?
Es incierto saber el segundo paso hacia donde se dirige
¿Quién adivina si el sol saldrá con nieve?
¿Cómo puedo saber si me amas y si te amo?
Mis dedos pintan corazones en el aire
Una cometa se dirige a un destino desconocido, pero visible.

¿Qué hay más allá de la muerte?
Si desaparecemos para siempre, ¿qué puede tener sentido?
Sueño extraño es la vida, y precipicio oscuro nos parece morir.

Cuando ya se acercaba el día, lo vi levantar los brazos:
¡Tan linda!... -¿Quién es linda padre? -Ella, la mujer de luz,
Y con suavidad bajó mis brazos, era un resplandor que yo no veía
Pero él, en medio de lo febril de su mirada, la descubrió.

Y cuando mi madre en aquélla inquietud de la muerte me invitaba a una luz
El sol… -balbuceaba una y otra vez…
¡Qué raro!, y le decía: mañana mamita, mañana te llevo al patio
Pero ella insistía, y por tres veces lo repitió:
El sol… el sol… el sol…

Hay algo más allá, lo presiento…
No valdría la pena tanto sufrimiento
Ni tendría sentido todo el esfuerzo para ser feliz.

Pero en medio de tanta belleza
No queremos ir a ese mundo del silencio,
Nos ahogamos en llanto sin querer aceptar
Y el potrillo enamorado, tan solo quería montar a su yegua
Bajaba de la montaña,
Sin saber que se estrellaría en su caminar.

¿Por cuántas estaciones, estarás en mi vida?

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, noviembre 8/14

ARNOLD ABBOT

Arnold Abbot. Imagen Internet

Arnold Abbott
Dad de comer a los hambrientos,
Hoy en éste mundo de locos
Se castiga a un hombre por hacer caridad
Y la justicia se hace sorda y muda
Cuando ve la iniquidad.

Un anciano es vejado por alimentar aves
Un niño es hurtado del vientre de la madre
Un hijo se ríe de su madre para insultar al padre.

Se levanta un arma,
Se derriba un trono de palma
Donde se cobijan los pichones
Se abre la tierra para robar sus rocas
Y se le pone valor a la vida de los seres.

¿En qué mundo de locos estamos?
Ayer Arnold, ahora lloramos a los muchachos
Los ángeles de México...
Hace un rato a los miles de hijos perdidos de Colombia 
Como una historia muda en el tiempo
Secos huesos bajo tierra
Donde hoy acuna un ave
Tal vez a sus pequeños.

¿Qué nos sucede?
¡Se ha desatado el infierno!
¡Satanás!, ¡Satanás! 
Es verdad que has llegado
Habitas el alma del perverso
Tienes rostro de amigo, de hermano
Y para robar la vida de los inocentes
Te haces hombre vivo, muy sagaz
Entre las almas muertas.

Raquel Rueda Bohórquez 
Barranquilla, noviembre 8/14

¿EN DÓNDE ESTÁN?


¿EN DÓNDE ESTÁN?
Y se pasean los goleros que vienen por la vida...
No tienen alas como los cuervos
Pero sí tienen el alma negra como sus alas.

Salen a ver qué tienes...
Vienen por todo, no se contentan con poco
Se reirán cuando te vean salir de tu parcela
Y ocuparán con sus vinos caros tu alacena.

¡Derriben todo!, ¡aquí será mi castillo!
Construido con sangre y arena
Con leche de madre que amamantaba
Con críos de ternero que pastaban.

¿En dónde están ahora?
Muchos por ahí, libres como el viento
Tal vez sin conciencia ni alma
Siendo parte del muerto
Pero viviendo feliz y contento.

¡Qué miedo!, ¡me asusta la esquina!
El búho llora con aires de llorona
Ha sido testigo mudo y silencioso
Llevando en sus amarillentos ojos
Todo el horror vivido bajo el huerto.

¿Qué hacen?
Carros lujosos, viajes, paseos
¿Qué les importa?
Fueron por su trofeo, la vida que merecen
Y son pocos los muertos
Vendrán por más, como fieras hambrientas
Pues la ambición no cesa
Sino con la muerte.

Y ese día será tardío...
No valdrán gritos ni ruegos,
Ellos mataron la esperanza en la montaña
Y vejaron las flores, antes de asesinarlas.

Raquel Rueda Bohórquez 
Barranquilla, noviembre 8/14

JÓVENES DE MÉXICO


JÓVENES DE MÉXICO
Los jóvenes potrillos se han ido lejos

Una laguna secada entre llamaradas
Nos recordará que se fueron llorando, 
Suplicando por sus vidas.

Que un hombre violento esgrimió un arma
Pero que llegará el día de la justicia,
El demonio de la ambición anda suelto
Lo sucio y mundano 
Hace pecar al humano.

Florecerá un parque no hay duda
Se llenarán ríos con lágrimas de todos
Ese olor quedará en el ambiente
Y esos desalmados correrán a esconderse.

Serán ratas cazadas
No podrán con la conciencia
Es ella la balanza justa
Y por ella misma serán condenados.

Raquel Rueda Bohórquez 
Barranquilla, noviembre 8/14