jueves, 13 de noviembre de 2014

HUELLAS

Imagen: Internet

HUELLAS
Si el hombre supiera el valor de un arte, no dejaríamos que la pereza se apoderara de nuestras manos, para hacer cosas indebidas.
Un gran ejemplo ésta mujer, su pensamiento está en la pradera que recorrerá muy pronto, y deja huellas de sus manos en medio de flores azules, pintadas con gracia y dulzura, he aquí a un poeta que plasma versos sobre la vida.
Y el árbol sigue mudando sus hojas, amarillas, negras, rojas... no fue en vano ésta vida, se bendijo un huerto, y se construyó un poema, para que se posaran las mariposas pálidas del próximo invierno.
Raquel Rueda Bohórquez 


13-11-14

LA VOZ DEL ÁGUILA



LA VOZ DEL ÁGUILA
Conoce el águila de todos los senderos de la vida

Cruzó veloz sobre la más empinada montaña;
El viento fue su amigo, y el otoño su hermano.

Va y viene, sus alas son la inmensidad del llano
Entre sus garras el abrigo tibio le apena
Más hay un vicio que no es humano…

Desciende como la llovizna
Sabe del color exacto de las nubes
No hay engaño en su mirada.

Me dijo que arriba de todo hay inmensidad sin fin
Que ella no partirá jamás
Porque en algún rincón en el tiempo,
Habrá una pluma volando.
Tropezaremos con un gorrión cantando
Y la esperanza será el motivo bajo el sol.

¿Qué afán tienes?
No sé de cultivos, ni conozco de tus elevados pensamientos
Pero lo invisible me hace grande, me eleva
Y no me acuso de dañar a nadie
A pesar de que se mueve en mis garras
Un plumaje que fue una garza,
Buscando lo mismo que yo.

Y al rato, frío y paz…
¡Adivinen como son las estrellas!,
Si lo supieran dejarían de querer atrapar todo 
Lo que habita en las alturas,
Los pies sobre la tierra,
Y a pesar de todo, vuelan más que yo.

Abajo tienen lagos, montañas, ríos y cascadas
Hay becerros en las llanuras y cabritos en las lomas
No quieren al tigre ni a sus espadas
Pero ellos las fabrican para matar con sevicia.

¿Qué más desean?
Si pudieran vender los ojos de Dios lo harían
Él los está dejando hacer,
Mañana tal vez no llegue
¿Qué valor le diste a la vida?

¡Ahhh!, ¡qué delicia esta brizna de ahora!
Es lluvia de los ojos del Creador
El invierno llenará de cabelleras blancas las montañas
Todo se arropará como si la muerte hubiese llegado,
El frío calará huesos como las espinas,
Nacerán pensamientos buenos
Como flores en el campo, 
Pero al salir el sol otra vez por entre los pinos
Todos olvidarán el frío de ayer,
Para volver a su viejo camino…

Raquel Rueda Bohórquez 
Barranquilla, noviembre 13/14

EL BARDO/A Pedro Rueda B.


Mi hermano Pedro.

EL BARDO/A Pedro Rueda Bohórquez
Estuvo ahí el bardo esperando turno
Su poesía poco escuchada;
Entre viejos faroles de iglesia la lluvia llegó
Como una bendición, como día de fiesta.
Pasaban y pasaban los años
Pizza, helado, una que otra salida de amigos
¡Síiiiii! Peto Uea, mano mío, y te quiero
Sonaron besitos cual rocío en mi ventana.
Pero el tiempo seguía, cual hoguera encendida
Los ojos del bardo charcos y lagunas
Una libreta negra donde anotaba sus alegrías
También ahí, ajustaba sus penas.
Al fin, ¡llegó la hora de su poema!
Con paciencia infinita el corazón tembloroso
Viendo a todos y a ninguno, ajustó el pantalón
Movió los labios en un beso para sí mismo,
¿Tiemblan las piernas?, o piernan las tiemblan...
jajajaja!, una sonrisa le gané al destino
Hoy saldremos de nuevo a cualquier vecindad
Y él estará ahí, sin poder hablar, escribiendo su libro...
¿Qué dice?... y abrí una página...
Hablaba de un roble, de un camión viejo
Le dio vida a un grano de arena
Se volvió vencejo en verano
y fue golondrina en invierno.
Sus ojos... ¿eran diamantes en bruto?
Ahora brillaban, su lago interno, ¿dos lagos?
¿Estás llorando?, ¡no llores!
Mira brother, hay una primavera que se acerca
Y ahí en ese momento, seguro que sí
Me darás la mano.
Al fin se pudo... ¡claro que sí!
El poema fue terminado en tanto los perros jugaban
El partido del amor fue ganado,
Los muchachos le pusieron ganas al trabajo
Hubo bien para todos, y fuimos hermanos.
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, noviembre 13/14