lunes, 10 de octubre de 2011

TOROS BRAVOS


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El pastizal invita, imponente belleza
enormes cuernos los adornan demostrando su fiereza,
pero ahí están... corren veloces como niños por la pradera
aterrados  ante su depredador miran impávidos;
las flores revientan ante sus tristes ojos,
pequeños gladiadores con lanzas de fuego los amedrentan
su fuerza se somete ante la inteligencia.

¡Corre torito bravo!... el ruedo de la vida espera
mientras tus trotes agitados continúan
¡qué gran banquete serás, cuando ya vencidas tus fuerzas
se agiten ante las dagas, tu poder quebrantado,
las carreras acaban sin un beso de su lengua áspera...

Ella está allí... tan cerca pero tan lejos...
los observa, serán cebados y llevados al matadero
qué delicia de carne servida a la mesa, ¿quién lo niega?
a eso nos acostumbraron, más no a tu sufrimiento inútil
cuando tu destino fue marcado por el hombre,
¿porqué no vivir tu poco tiempo, con la placidez de tus mañanas,
recorriendo grandes senderos tras tus verdes pastizales?

Acaban los sones, tu bolero de Ravel nunca danzarás
sólo lágrimas de sangre esperan en los arenales;
tus gemidos nadie escucha, tus ojos manan  fuego
mientras la daga llega a tu corazón y una gran oreja es levantada,
el júbilo de bocas sedientas de tu dolor es un eco
no hay retorno a un ayer...
corres veloz y una gran dama blanca te espera
te nutre con un beso de miel y espuma con sabor a leche
mientras abres de nuevo tus ojos, tu pesadilla de vivir ha terminado.

Raquel
B/quilla, octubre 10/11

MANDARÍN Y SUS HIJOS VISITAN A "RANITA"


MANDARÍN Y SUS HIJOS VISITAN A "RANITA"


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Ranita estaba muy emocionada hoy, su comadre "Mandarín" llegaría de visita,
ella le había contado que un gran árbol la cobijaría mientras sus muchachos crecían,
sus ojos desde allí divisarían sólo un instante el paisaje a su alrededor 
también el gran lago en donde vivía su amiga y comadre a quien tanto amaba.

Había contado que sus muchachos un poco tímidos casi nunca se enfrentaban al vacío,
pero ella tomó la decisión y se lanzó, invitándolos: "ven... ven acá mis niños, nada pasará",
a lo que los chicos "no má teno meoooo" decían ( pio pio pio)...  
pero ella con ese amor tan paciente les anunciaba:
aquí hay un gran lecho de hojas secas que nuestro encino preparó para nosotros,
no les sucederá nada, y los alentaba una y otra vez con infinita paciencia...

El nené que admiró todo primero,  fue quien dio el primer salto 
su corazón latía aprisa pero ya una vez el vacío pasó,
empezó a llamar a mami emocionado y alentó a sus hermanos:
pío píooooo / que significaba: ¡¡ atrévanse hermanos míos es una rica sensación!!
¿vieron que no sucedió nada conmigo?

De a uno se lanzaron mientras la comadre de Ranita según le contaba
los animaba, los últimos fueron los que reventaron el cascarón más tarde
estaban un poco tímidos  pero aún así con coraje se lanzaron a la vida hermosa que ofrecía aquél pantano donde unas grandes flores de colores los esperaban.

Era el anuncio de la primavera y la comadre Pekín corría por entre las secas ramas,ese olor inigualable la llamaba mientras ranita no cesaba en croar, tenía todo preparado; sería una gran fiesta con esos chicos algodonosos y bellos que llegarían aprisa,sus cánticos como una oración al cielo y sus pequeñas paticas acariciando cada loto donde ella vivía cada día con una felicidad plena, sin exigir nada más...

Escuchaba los chillidos de los niños, Ranita subió por un gran lirio, después hizo malabares por algo que un bípedo atravesó en su lago con motivos que adivinaba pero que prefería no pensar en ellos, saltó hacia una rama más alta...desde allí los divisaba embelesada. Levantó  su mirada al cielo como otras veces; se admiró de la creación aún sin saber quién había fabricado todo para ella con tanta belleza y tanto amor que ningún pintor sería capaz de plasmarlo, sólo había uno de luz que ella imaginaba siempre en sus sueños,  y saltó hacia la orilla para esperar a sus bulliciosos invitados...


Raquel
B/quilla, oct.10/11