jueves, 3 de abril de 2014

¿TE HAS IDO?

¿TE HAS IDO?

2 de abril de 2014 a la(s) 8:44
¿Ya te has ido?, espero no te hayas enojado,

que un vacío ha quedado en el corazón

por haber mi amor desnudado.



Si regresas... ¿Qué te puedo decir?

¿Acaso la cascada retorna a su fuente?

Sé conmigo inclemente,

como lo hace el mar con las rocas

cuando las mueve la corriente.



Si te enojaras conmigo...

¡No quiero ni pensarlo!

Un descanso, para escribir unas letras,

un remanso para verte a los ojos

a través de una línea abierta.



Pero si regresas, sin enojo...

Nada diré, sólo que me perdones,

es el vicio del amor, una espada que hiere

lastima  a quien nada recibe

pero  da, sin esperar respuesta.



Eres ajeno, ¿somos de alguien?

Somos de la brisa, del invierno...

Somos de la luz de las luciérnagas,

de la oscuridad que nos llama en silencio

sin renegar, cuando encuentre el camino,

y no tenga  la dicha de estrellarme contigo.



Raquel Rueda Bohórquez

Barranquilla, abril 1/14


Una sábana blanca cubre el bosque y en los ojos del hombre, un velo...
Imagen: Internet

Una sábana blanca cubre el bosque 
y en los ojos del hombre, un velo...

CONTIGO

CONTIGO

2 de abril de 2014 a la(s) 9:04
Estoy sola contigo, la vieja verde amiga tuya,

tomo tus manos y tú las mías, y empieza la función,

un tango, nos enredamos sin tocarnos,

desde éste viejo computador.



Quiero bailar entre tus brazos y te apartas,

dejas una rosa entre mis dedos, y me espino...



¡Ven amor!... ¡bésame!, no me dejes ahogar en el silencio

arrópame de piel y carne,

déjame pecar que el amor no me condena.



Ampárame en tus ojos,

permite dar un beso a la niña que guardas

toco tu piel tan consentida,

y me quedo en ella como mi abrigo,

el invierno no existe, la nieve no cae...



Nos perseguimos,

nos volvemos locos de amor

termina la melodía y creemos que continúa,

un vaivén de cinturas, la tuya y mía

y toco el cielo en un instante...



¿Te has reído?...

Así, ríe ahora, en que eres mío y soy tuya

que repito en tu cuello suavemente

¡te quiero!,

y un son nuevo inicia

al despuntar el día.



Raquel Rueda Bohórquez

Barranquilla, abril 1/14



La perdiz  halló el camino, pero se quedó enredada en un beso.
Imagen: Internet

La perdiz halló el camino,
 pero se quedó enredada en un beso.

TIEMPO

TIEMPO

2 de abril de 2014 a la(s) 12:23
El tiempo no existe...

es una ilusión pasajera, como la vida.


Escucho un sonar,

como de gotas caer sobre las flores,

y al momento, ¡qué pálidas están!.


La piel se arruga,

el caminar se hace lento,

la voz se vuelve de niña consentida...


¿Envejecemos para regresar a la niñez?

Bonito fuera que la piel no se arrugara,

ni doliera la vida al final...


Pero vivir feliz,

un solo instante vale la pena,

sin mirar el reloj,

ni contar el tiempo.



Raquel Rueda Bohórquez

Barranquilla, abril 2/14





Cuando morimos, nuestra piel es más  fría que la nieve, el frío conserva, y el calor nos devuelve a la tierra.
Imagen: Internet

Cuando morimos, 
nuestra piel es más fría que la nieve, 
el frío conserva, 
y el calor nos devuelve a la tierra.

LADRILLO

LADRILLO/A Lidia Pereda

2 de abril de 2014 a la(s) 10:54
Ladrillo amigo, hoy me antojé en hablar contigo,

una respuesta me darás cuando vaya al mar,

y las olas, besen con pasión cada uno de tus hijos.



¿Sabes algo?,

a veces paso por mucho más que tristeza,

cuando ni siquiera uno como tú,

adorna la casa de un caminante,

de tantos que veo pasar por ahí,

sin techo ni cobijo.



Eres el rojo fuego que ha quemado tu vida,

me doy cuenta de lo fuerte que eres,

pues has sido probado, como el oro del alfarero

en hornos rojo fuego.



Ladrillo amigo:

hoy tengo la sensación de que muchos de tus hijos,

regresarán a la playa,

caerán muchos, y otros se levantarán uno a uno;

eres el inicio de algo,

un sino nuevo en los corazones de todos,

en donde al plantarte, se quiso cambiar la realidad,

y te hemos herido, como a tu montaña madre,

cuando  hemos robado a pedazos su piel tan amada.



Piso tu carne  y no te duele,

los mulos te llevan a cuestas

las espadas rompen sus pieles doradas y negras,

pero ellos siguen, los he visto verse a los ojos,

aun cuando están tapados,

y han llorado perlas claras,

que al mar han llenado.



Ladrillo amigo:

hoy escucho milongas para recordar que eres como yo,

que yo soy como tú, un grano,

nada más un grano de arena en el desierto.



Eres miles de nosotros,

queriendo fundar un jardín,

o alcanzar una estrella.



Raquel Rueda Bohórquez

Barranquilla, abril 2/14



Y se elevó airoso, grano a grano hasta donde el hombre quiso, pero un suspiro de mi amor, lo regresó a su playa, nuevamente.
Imagen: Internet

Y se elevó airoso, 
grano a grano 
hasta donde el hombre quiso, 
pero un suspiro de mi amor, 
lo regresó a su playa, nuevamente.

LAS FLORES

LAS FLORES

2 de abril de 2014 a la(s) 12:40
¡Qué bonita la señora!,

así contemplaba mi madre las flores,

hablaba con ellas, las acariciaba…

decía que la voz de Dios,

 era su perfume.



Si le hablas a las rosas, ellas te responderán

algunas veces te herirán sin culpa

pues su belleza, es un don lleno de espinas.



¿Quieres un rosal?

debes tener cuidado con ellas,

necesitan riego, abono, cada día

y ante todo, mucho amor,

de lo contrario, morirán tristes,

no crecerán ni tendrán una primavera.



¡Háblale a las flores con amor!

ellas son mujeres que se han ido

pero regresan para alegrar los días al hombre

para perfumar sus corazones,

y regalar miel al pasajero,

que enamorado, llega y marcha

dejando un beso en su alma.



Raquel Rueda Bohórquez

Barranquilla, abril 2/14



Ella no sabía que en el fondo de su corazón, un alma le respondía, con olor a orquídeas.
Azucena.

Ella no sabía, 
que en el fondo de su corazón, 
un alma le respondía, 
con olor a orquídeas.

A MI AMOR

A MI AMOR

3 de abril de 2014 a la(s) 10:19
Eres mi amor, como un cervatillo asustado,

entrego mis pechos llenos de miel a tu boca

la montaña de ébano puro, para que descanses,

el bosque tupido, entre blanca nieve y oscura noche.



Eres mi amante, el sol dorado que acabo de ver

Tan ardiente, tan rico como del panal la miel.



Tu boca es como una fruta madura, húmeda y jugosa

donde mi lengua tiene el placer de probar,

y mis manos, la dulzura de acariciar.



Despierta estoy, un nuevo día mi Jefe me ha donado

para contemplar cada belleza, cada suspiro tuyo

tan invisible, tan intocable como la luz divina

que se guarda en el corazón, y rebota en el alma.



Amante mío, ¿estás aquí?...

Que juzguen los hombres a una mujer

que las bocas se vuelvan veneno de víbora,

que los chismes corran por doquier.



Aquí estás, conmigo...

¿Eres intocable acaso?

El bien que persigo es tu pecho

la estrella buscada está en tus ojos,

la sonrisa que persigo está en tus labios

la felicidad que añoro es verte algún día,

para perderme en infinito placer

bajo la sombra de tus brazos

y el cobijo de tus piernas.



Raquel Rueda Bohórquez

Barranquilla, abril 3/14



Entre tus brazos, conjugaría el mejor verbo de todos, y el bosque sería nuestro nido de amor.
Imagen: Internet
Entre tus brazos, conjugaría el mejor verbo de todos, 
y el bosque sería nuestro nido de amor.