Te adoro hijo, nuestra locura nos llevará al cielo.
ESOS LOCOS (2) R
Estos locos caminantes
que llevan la mochila vacía
pero el corazón lleno,
y los ojos plagados de paisajes...
¡Qué más quisiera que tornara la juventud
para seguir sus pasos!
Esos dementes mechi largos,
que andan por ahí sin hacer daño a nadie;
esos locos adorables que llevan en su mochila un sueño
que atan a la garganta.
Esos divinos muchachos que caminan cerros y montañas
se arrodillan ante la tierra y siembran esperanzas…
Esos greñudos que escriben poesía
y le cantan al pájaro espino y a la cigarra.
Esos jóvenes que no tienen pena de llorar
ante el dolor ajeno,
que aman a las muchachas como a la guitarra y la flauta,
que se contentan con ver cada nuevo paisaje
y caminan y caminan
sin pedir a nadie nada,
sólo que los dejen cruzar y cruzar
bosques y quebradas…
Esos valientes que se atreven a vivir sin nada,
sin aspirar a la vanidad, ni a las posesiones vanas;
que llevan una biblia en los ojos y han guardado la espada
para no herir al viento que acomoda sus cabellos
a la libertad de un canto sobre la loma más alta.
Esos chicos que a veces marcamos porque nos da la gana
y que no aceptamos su diferencia y la grandeza de sus almas,
que peregrinan cual pájaros libres sobre las olas empinadas
y bajan luego en picada, para subir airosos
a juntarse luego en un abrazo bajo una fronda mojada.
¡Esos son los sabios que salvarán al mundo
del caos que les hemos dejado!
Raquel Rueda Bohórquez
20 07 17