viernes, 31 de mayo de 2013

¿QUÉ TENGO PARA HOY? [1]

¿QUÉ TENGO PARA HOY? [1]

Un nuevo sueño aparece, no sé si en mi corazón o en mi mente, pero ahí está;
es un talle en mármol donde la frialdad desaparece, para que una lluvia de luceros me despierte en medio de la nada.

Tengo un nuevo día para soñar y creer que el amor es una llama que no se apaga, que la enciende el fuego de una mirada contemplando a un ave inquieta, como si deseara hablar, y saber que puedo dialogar con ella, nos podemos inquietar las dos y ser parte de lo mismo, sin ser nada tal vez, pero concretamos, que estamos buscando lo mismo en diferente rama.

La posibilidad de iniciar mi día llena de expectativas, despidiendo a mis muchachos un tanto vacíos de estómago, pero llenos de brillos mágicos en su alma, que cada día los hace mejores personas, sin alardear, sin gritar, con un recuerdo común de nuestros ángeles que siempre nos acompañarán.

Aquí estoy, mi silla no se ha mudado, mis fiebres me han dejado unas cuantas llagas que poco a poco sanan, pero hay una sed que no puedo calmar fácilmente, mas estoy alerta, las nubes están oscurecidas hoy, presiento un gran aguacero para calmar tantas hambres que estaban ahí, y la sed de una playa ardiente, que no se deja vencer por las olas y acepta con agrado los besos del mar.

¿Qué tengo para hoy?... A ti... tu mirada ausente. Tengo una pared llena de recuerdos, pero un perfume, unas campanas pequeñas suenan, y sé que eres tú, quien viene y desea mostrarme un camino para que sea feliz.

Tanto hay por tener, ¡tanto por conseguir!... pero solo busco felicidad, no está lejana; creo que tropiezo con ella cada segundo, hay un ángel que sabe lo que me conviene y me dice: "Espera un poco, no impacientes... lo que deseas lo tengo, y cuando sea propicio el tiempo, llegará a tu mesa".

Por tanto, tengo que agradecer a Dios porque no soy parte de una historia de maldad, sino que hay algo más que debo hacer, iniciando por amarme, para así poder entregarme a los demás, como tanto nos exige la conciencia.

Tengo, tengo que terminar mi trabajo de hoy, preparar un almuerzo que no se queme y procurar inventar una receta que no solo me agrade a mí, sino que tenga ese sabor de amor, que tal vez es lo que le falta a mis comidas.

Raquel Rueda Bohórquez

Barranquilla, mayo 31/13

GOLONDRINA [2]

GOLONDRINA [2]

Sobre su nido, la golondrina,
con el corazón lleno de contento,

escucha el son que trae el viento

para de allí tomar el sustento.


Y como un rayo veloz la veo,
me admiro de tan pequeña imagen
con tantas crías que nada le detiene;
abre sus alas surcando el cielo
para tomar lo que le conviene.

Entre su pico miles de veces
va y viene como ángel manso,
llena los vientres de sus amores,
trina de regocijo entre sus flores,
y al fin, ante sus silencios,
se da un descanso...

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, mayo 31/13


TUCÁN [3]

TUCÁN  [3]


Mira al colorido tucán,
un rayo de luz advierte.


No es su cantar lo mágico,

son los colores primaverales
que adornan enorme pico
para confundirlo entre los rosales.

Su mansedumbre es innegable;
de cantor, no es preferido,
pero sabe danzar agradecido
aunque su pico tome menos
de lo que puede.

Se pierde un tanto entre la fronda,
abre sus alas a un nuevo día,
mágicos rayos lo convierten en niño
que se duerme, ante sus cariños.

Para la lluvia es un enamorado
y con una rama pronto la invita.

Luego, sobre una colcha de dulce nido
se abrirán grandes picos agradecidos.

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, mayo 31/13 


A UNA MARIPOSA [4]

A UNA MARIPOSA [4]

Eres la reina de mi jardín

pequeña niña de quebradizas alas,

donde una cárcel fue tu morada
y la libertad, el fin buscado.

¡Danza mi reina ante mis ojos!
Tus matices tanto embelesan,
tus bellas alas, dulce contento,
tan nacarada tu alma,
se la roba el viento.

¡No te despidas tan prontamente!
Deja un suspiro entre mis labios
mientras la magia de la vida pasa,
y con la brisa voy yendo.

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, mayo 31/13 

EJEMPLOS [5]

Tony Meléndez-


EJEMPLOS [5]

Un gran ejemplo a seguir es Tony Meléndez.  
Muchos tenemos todo y siempre nos quejamos,

otros tienen demasiado y no están conformes.

Los campesinos de mi patria caminan por ahí a pie descalzo,
se vuelven vendedores de limonada, de tinto,
pero le arañan a la vida,
dejando atrás su doloroso pasado.

Muchos no tienen una mano,
pero tienen la otra.
No tienen piernas,
tienen una...

No tienen pechos,
tienen el pecho que guarda su corazón
y sin embargo nos quejamos...

Hay otros que nada tienen,
pero agradecen por la vida,
que es el único bien que debemos apreciar.

Otros tienen el don de la vida,
pero no lo aman,
acaban con todo lo que pueden
y hasta más...

Si no te queda nada,
ni tus brazos ni tus pies, ¡canta!
Pero si no tienes voz para hacerlo,
entonces mira lo maravilloso que hay a nuestro alrededor.

Pero si tienes los ojos y no ves nada,
no te sientas perdido,
tu pensamiento tiene alas
y con ella vuela tu alma.

Lo único que no debemos perder es la fe,
ella será el motor que impulse nuestra vida,
y nos aliente a continuar.

Sin fe, ya no seremos nada,
ni sombra, ni huella,
 ni cenizas al mar lanzadas.

Raquel Rueda Bohórquez
31 5 13 

VERDAD [6]

VERDAD [6]

La mejor música no está en las palabras

ni está en el sonido del violín, o el arpa,

la más bella melodía está en la verdad,
y es por eso que a veces somos odiados.

Nunca mientas,
Y menos para castigar a otros sin motivo.

No adules, pues cuanto más adules, 
más mientes.

La vanidad y la mentira van de la mano,
nunca metas los dedos en el fuego por alguien,
menos, si te ha dicho muchas veces 
que eres lo mejor.

Si te han pisoteado injustamente,
¡levántate!... hay mucho trecho por caminar.

Quien te da la mano para levantarte,
no será quien te pateará más adelante,
¿o sí?... pero si sucede,¡apresúrate!,

otra mano llega, 
otros ojos te detallan,
y el silencio de sus labios, 
será un gran tesoro a cultivar.

Raquel Rueda Bohórquez 
31 5 13 







EL PERFUME DE MAMI [7]

EL PERFUME DE MAMI  [7]

Entre todas las flores,
reconozco el perfume de mi madre.

Tiene olor a calidez, a hierba fresca,

huele a café caliente recién molido,

a chocolate espeso con pan 
del horno recién salido.

El perfume de mi madre 
me llena los ojos de perlas
que se escurren, 
ladera abajo;
son un rosario de penas 
ante su ausencia.

Huele... 
¡Ahora mismo huele a ella!
En la pequeña flor del campo 
que diviso lejos, ¡muy lejos!,
brotando en un pequeño rincón, 
cerca de un manso arroyuelo.

Mamita, todo huele a ti...
Hasta la ausencia tiene olor a jazmín.

Tus ojos huelen a madreselvas, a pino silvestre.
Un girasol levanta el rostro para verte,
en tanto pasas, pasas como un aroma,
por éste desierto triste de la vida.

Raquel Rueda Bohórquez 
31 5 13

A UN AMIGO [8]

A UN AMIGO [8]

Hola mi querido amigo, no tengo pluma en mis manos, ni libreta, pero si estoy frente a mi hoja en blanco de hoy.

¡Quisiera decirte tantas cosas!, pero cada palabra se ahoga, pues no quiero pasar por arrogante o soberbia, aunque de esto tengo un poco, es válido, entonces no tendría con qué defenderme.

Tantos días, muchas horas compartiendo, mi vida entera puesta en el tapete, tu amistad, que pregonabas era la más sincera del mundo, la mía, mis locas y necias palabras donde nos buscábamos para reír a carcajadas.

¡Cómo pasa el tiempo!... se olvidan los sueños en las enramadas, mientras el mirlo va y viene con pequeñas ramas, y se construye un nido, y nos llenamos de esperanza ante los sueños ajenos, y creemos que los nuestros serán realidad cualquier día.

Cada vez un poco más vieja, sí, el tiempo no pasa en balde, nos llenamos de pecas y pecas, de penas y penas, y pocas alegrías; pero vamos copiando de cada día un poco, escribiendo un tanto para que no se olvide, pues a ratos mi mente queda en blanco, tengo que correr y regresar al mismo sitio para saber en qué pensaba, y aunque te parezca imposible, mi pensamiento siempre has sido tú.

Un recuerdo de un atardecer, de una cálida quebrada, de un desliz de tus manos y el temblor de mi cuerpo...

No es malo recordar, finalmente los recuerdos nos mantienen despiertos, no comprendemos los caminos de la vida pero ahí están, se van los más pequeños y nos quedamos los viejos, para ver algo, tal vez ellos aprendieron primero lo que tenían que aprender, para regresar al sitio de los sueños.

Hoy te escribo porque no quiero que te pierdas de mí, pues estás pegado como la hiedra sobre la roca, como el canto de amor sobre un pequeño árbol que hoy ha de estar gigante, con nuestro corazón entrelazado, sin saber que el destino nos separaría.

Sabes que es para ti, ¿a quién más podría hablar de mi amor?
Tantos años compartidos en el mismo sitio, soñando los mismos sueños, bebiendo de los mismos labios y empapándome de tu sudor joven y llenándome de tu sonrisa abierta.

Me queda algo de ti: 
Esa promesa de amor viendo hacia la luna, donde le pedimos a la misma estrella que siempre estuviéramos juntos, y ahora mi pensamiento te reúne. Esta noche saldré de nuevo a recordar esa promesa, aunque el cielo esté sin estrellas.

La fuerza de mi amor está aquí, nada ha cambiado... siempre estarás en mi corazón y nadie ocupará ese sitio que es tuyo, aunque te hayas ido, y en algún sitio, en alguna vereda te encontraré, y sabré si aquel "te quiero a morir", era una realidad, o sólo la copia de esa linda melodía para que me ilusionara. 

Te quiero, 

Raquel Rueda Bohórquez
31 5 13