jueves, 29 de agosto de 2019

DENTRO DE MÍ

DENTRO DE MÍ

Cada tanto algo muere dentro de mí...
Es como si la vida galopara entre llamas
y los gritos de indiferencia se ahogaran
en medio de sonidos fantasmales
y negras humaredas.

Dentro de mí sé que la vida continúa
que los jóvenes de ahora, o se levantan,
o arrastran la culpa de no hacer nada
y perder el ánimo en puras pendejadas.

Dentro de mí voy terminando la faena
pero cada día se marchita un árbol 
con los venenos de la indiferencia
que son más letales que el odio. 

Dentro de mí, voy perdiendo la fe
porque nadie cambia en verdad,
se grita el amor en las redes
pero es vergüenza la realidad. 

Dentro de mí, voy como el ave gris
que ha perdido el horizonte entre la lumbre
y el venado y su familia que asustados
han llegado hasta el fondo buscando verdes prados
pero su carne ha quedado extendida
confundida entre las cenizas.

Dentro de mí algo se muere... 
Lentamente la vida pasa y nada sucede,
el gorrión no es visto con respeto
y los venenos de la ignominia
riegan extensas flores que no besan las abejas.

Dentro de mí sé que todos perdimos
pero que nadie es capaz de comprometerse
porque ni siquiera ha planeado el mañana
pues es tan incierto como el hoy. 

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, 29 08 19












ROSTRO DE PÉTALO

ROSTRO DE PÉTALO

Linda eres flor del campo
con el rostro envuelto en pétalos
tu cara bonita sonrojada
en medio de un jardín 
que baila sones marinos
cerca del Magdalena.

Recuerdo todo de ti
hasta la peca grande 
que parecía un mapa
y se juntaba con tus ojos
donde se estampaba la playa
con brillos de cigarra.

Rostro de pétalo,
niña dulce de manos ajadas
que en el camino real
dejaste al amor plantado
en medio de juncos y sinsontes.

Aquí de nuevo en el rincón del poeta
donde tu alma vaga con nostalgia
buscando halar mi cometa
converso un café contigo
tranquilizando a mi diapasón 
de sus viejas penas.

Te amo cual vereda fresca
en donde el amor se quedó varado
esperando un corazón lleno
con mis manos a las tuyas aferradas.

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, 29 08 19

FUEGO

FUEGO

Pienso en el fuego
en las guacamayas y su pico
en el dolor del caminante
y en lo poco que puedo llorar
para que alcance siquiera
una flor apagar. 

Viene la guerra 
asoma fiera con sus dientes
y se esconde la anaconda
bajo la corriente que hierve
y la espuma que penetra la carne.

No habrá paz mientras existan los corruptos
no volverán los dueños de la tierra
porque ella pertenece a otros
que por azadón llevan un fusil
y por bandera la libertad de la patria. 

Pero estoy en la misma esquina
ya son 60 julios, más de medio siglo
viendo correr la sangre del inocente
y a los poderosos escucharlos brindar con júbilo. 

No volverá la paz a la tierra
mientras exista la ambición 
que es y será 
la ruina para la humanidad.

Raquel Rueda Bohórquez 
29 08 19