viernes, 4 de mayo de 2012

ANDERSON RUEDA LORA Q.E.P.D.



ANDERSON Q.E.P.D.

Nos sorprende la vida cada segundo, cuando más tranquilos estamos; y hoy es uno de esos días tan tristes y dolorosos que no queremos aceptar una realidad, donde nuestros muchachos vuelan primero, totalmente sanos y felices, luchando por un futuro, sin vicios, dedicados a la finalidad de su existencia, llenos del candor de las primaveras y con el cántico de sus palabras en un mundo cada vez más hostil y alejado del fin para el que llegamos, nos negamos a la aceptación de una marcha como la tuya, cuando tenías todo por terminar, dejándonos en un limbo doloroso sin tu hermosa presencia llena de encanto. 

¡Qué sorprendidos quedamos ante los designios del destino!  Te sorprendió el atardecer aprisa, como siempre en todas las labores que desarrollabas como un muchacho ejemplar, con tus proyectos de matrimonio aún a tu temprana edad, ¡qué difícil  aceptar que te has marchado así, en alas metálicas que robaron tu preciosa existencia!

Sólo puedo decir mi querido sobrino, que todos admiramos tu manera de ser tan gentil, que todos sufrimos por tu pérdida y que ahora serás nuestro ángel que nos ayudarás a soportar ésta pérdida, así también a saber vivir cada segundo perdonando y amando siempre, sin guardar rencores en nuestro corazón.

¡Qué muchacho tan bello!, qué ejemplo para los jóvenes que aún están aquí, ahora podemos mirar los atardeceres con la ilusión de que estás en ellos, que ese dorado hermoso está conjugado contigo y las estrellas luminosas te recibirán; con sonidos de trompetas y el abrazo del único Jefe a quien debemos arrodillarnos.

Mi Quechewito,  en nuestro hogar siempre estarás presente pues todos te amamos, serás el símbolo y el ejemplo  a seguir, y me atrevo a decir que Dios te quería allá, aquí el mundo está lleno de corrupción y tú estabas destinado como tantos jóvenes que marchan así, a formar parte de ese coro de ángeles que nos guían, desde ese sendero de luz al que ahora perteneces.

Te quiero por siempre, te queremos todos y nunca ese brillo tuyo será olvidado. 

 Descansa en paz mi corazón.


TU MADRINA


Barranquilla, mayo 3/12