martes, 30 de septiembre de 2014

LAS PERLAS/A Tato Ospina

Irma Abozzi

Y PERLAS/A Tato Ospina
Un aguacero nos vuelve manantial
a la orilla de los mismos güaduales
que una vez nos juntaron.
¡Vi tan de cerca el mar!,
estuvo ahí por todos los siglos
y arrimé con él perlitas de sal
para dejarlas en tu orilla.
Y fueron rosario en tu cuello
con un crucifijo donde orabas por mí,
mientras me alejaba por los caminos marcados
sin saber cuál sería mi destino al fin.
Pero fuiste lluvia clara en mi vida,
brotó translúcida de mis ojos
ajustándose a las laderas de mis pómulos,
y la blancura de tus labios
tornó en aguacero en mis niñas
y en gemidos alargados
cultivados en el pecho.
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, septiembre 28/14

DE PAPEL

DE PAPEL 
¿Les conté sobre mi barquita?
Ya no tengo miedo,

Ella me llevó por inciertos caminos
Pero nunca zozobró.
Una espada a mi espalda
Una lengua a mi izquierda
Una mano a mi derecha,
Pero mi barquita de papel continuaba.
Parecía una flor de loto jugando...
La corriente fuerte me impulsaba,
Aprendí a navegar en oscuras aguas
Vi como gigantes podían habitar ahí,
Pero con suavidad ella me acercó a tu orilla.
¿Esos arenales son de oro?
¿Las palmeras se pueden sostener?
Los monos saltan desde gran altura
¡Son tan pocos los que se hieren!
¡Y es tanto lo que debo ver!
Me di cuenta que providencia era mi barca
Que a pesar de lo oscuro de la noche
Brillan las estrellas, iluminan el sendero
A quienes deben caminar en la oscuridad.
¡Mi linda barquita de papel!
Ajustas mi camino a tu sendero
A la montaña plácida donde anida el águila,
Al pastizal, resguardada bajo la sombra de una roca
Y puedo divisar un amanecer
Un divino ocaso, ¡otro día más!
Cuando acuse la noche a fantasías
Y me conmueva una pluma de garza
Bajando como lágrima
Y subiendo como espuma
Al cortejo del mar,
Mi barquita pequeña
Hasta tu puerto me llevará.
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, septiembre 29/14




SI LA BARCA

SI LA BARCA
¡Si me llevara a donde quiero!,
pero ella tiene un timonero

un tiempo para ir y venir

a través de los segundos
y la distancia señalada.
Hay inquietud hoy
pero no hay afán,
me he de quitar las sandalias
para tocar sus aguas y pasar.
¡Límpiate la boca!, -escucho-
abraza un poco más,
recoge más flores del campo
y ofrece desde la montaña,
perfuma con el aroma que a ellas doné,
deja caer tus lágrimas en el mar
para que no se pierdan
y sea más profundo tu meditar.
Nada estrellará contigo,
pero si una roca en tu camino es puesta
tu barca sabrá esquivar a mi voluntad
y podrás nadar contra la corriente,
mientras ella te busca y alcanza
para contigo continuar.
Ancla en mi corazón
aquí no hay pérdida,
mi playa es la vida que buscas
soy quien guía en medio de las sombras
y la luz en las estrellas
cuando todo para ti deje de brillar.
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, septiembre 30/14




VIENDO A VER QUÉ SUCEDE

VOY EN ENERO 2014.