viernes, 10 de junio de 2016

PUEDE SER (38)

PUEDE SER (38)

Puede ser que El Mago esté pasando por aquí…
El sonido que producen las alas de una libélula
Al besar las aguas pálidas de un lago,
Me han hablado de lo grande de su amor.

Ha de ser que su magia ha tocado tu frente,
Y las fiebres de la vida se agigantan,
 Así como los corales en sus aguas marinas.

Puede ser amigo mío,
Que éste día se nos ha pintado de un tono dorado,
Que la tarde lluviosa es para que nos acerquemos al jardín
Y veamos de qué manera lloran las hojas,
Pero antes de llorar, se llevan el cielo pintado en ellas.

La melodía al fondo es de nuevo el mirlo,
Le encanta sorprenderme;
Le fascina llegar a mi árbol con su fiesta,
Y abrir sus alas ocres con el pico lleno de oro
Que alegra mis instantes, y bendice mis segundos.

Creo que la mirada de un padre, es parecida a la lluvia,
Y la de una madre, es el oasis en donde sus aguas se estacionan,
Para adivinar del cielo cada estrella,
Y todo pájaro de nieve que se esconde en su espejo
Y en un instante se difumina.

Puede ser que todo sea un sueño.
El mismo sueño del poeta demente que se inventó la vida,
Y nos puso a sudar con su ojo mágico pegando de frente,
Para que la sintamos y aprendamos a ver todo
Como si “todo” fuera Él con su vara mágica
Adornando el paraíso con todos sus paisajes,
Que son el regalo a un parpadeo,
A un mirar contemplando, a un reír llorando,
A un morir deseando vivir, ¡pero ya es tarde!;
Nos perdimos la obra por andar buscando rosas en medio de las rocas,
Y nos espinamos muy pronto sin saber de sus aromas.

Nos vamos a su antojo
Al estirar de su mano de cristal 
Que se robará nuestro último aliento
Para llevarnos a otro jardín, a otra fuente.

Puede ser que hoy te halle
Y me encuentre en medio del paisaje más verde,
Jamás soñado…

Raquel Rueda Bohórquez
10 6 16






No hay comentarios:

Publicar un comentario