EDUARDO JULIÁN
No estaba viejo mi espíritu
cada poema llenaba mi alma
sin pensar que ayer,
no habría para mí un mañana.
Los dejo, despacio…,
sin dolor, fue silencioso;
crecieron alas en mis pies y manos
y ese viejo achaque
que hablaba agotado,
fue un poema,
¡tan solo un poema
que no había declamado!
¿Saben qué pasa?
Estuve atento ese día…,
fue la emoción, la fantasía
más un ocaso vislumbré en la fuente,
donde de a poco, se quedó mi vida.
Alcázar de Dios, es ahora mi sitio,
una estrella iluminó el camino.
No me lloren, estaba dormido;
desde aquí recito sus versos,
más no olviden rezar por todos,
y al menos recordarme
cuando mi voz escuchen
guardada en el cofre
de mis fantasías.
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, abril 22/14
Escritor, declamador y poeta de RPB
cada poema llenaba mi alma
sin pensar que ayer,
no habría para mí un mañana.
Los dejo, despacio…,
sin dolor, fue silencioso;
crecieron alas en mis pies y manos
y ese viejo achaque
que hablaba agotado,
fue un poema,
¡tan solo un poema
que no había declamado!
¿Saben qué pasa?
Estuve atento ese día…,
fue la emoción, la fantasía
más un ocaso vislumbré en la fuente,
donde de a poco, se quedó mi vida.
Alcázar de Dios, es ahora mi sitio,
una estrella iluminó el camino.
No me lloren, estaba dormido;
desde aquí recito sus versos,
más no olviden rezar por todos,
y al menos recordarme
cuando mi voz escuchen
guardada en el cofre
de mis fantasías.
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, abril 22/14
Escritor, declamador y poeta de RPB
Él no está, se fue de paseo, un Alcázar fortificado es su sitio ahora. Q.E.P.D.
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