viernes, 19 de octubre de 2012

SIXTO, EL ÚLTIMO TINIGUA




SIXTO, EL ÚLTIMO TINIGUA

Me llamo Sixto… el último…
Tal vez el primero en ser escuchado.



Todos sabrán que hubo mil heridas.
La selva fue mi refugio y las aves mi remanso.
Mi madre agonizante suplicaba nuestras manos
cuando se derribaban sus brazos
cegando con sierras sus alas.



Mi historia se perderá en el mutismo,
nadie dirá nada, ni sentirá pena
aunque espero un poco de justicia…

Me despido de mis hermanas emplumadas,
de las almas que brotaban desde los manantiales
y las rocas que conocen de nuestras glorias y penas.

El espíritu de mi madre está enojado,
todos conocerán de su furia
cuando los cerros se desprendan de sus bases
y salgan todos los obligados a marchar
con sus lágrimas como ríos violentos
recorriendo todos los senderos hurtados
barriendo el estiércol de las bestias
y su maldad sobre mis valles.

Me llamo Sixto… el último Tinigua…
No hay más nada por decir…

Raquel Rueda Bohòrquez
Barranquilla, octubre 19/12

No hay comentarios:

Publicar un comentario