DESDE MI VENTANA 3
tantos sueños, casi que parecidos a los míos
las gaviotas con su cántico al atardecer
formando aquélla divina imagen en el cielo,
con una melodía que parecía feliz
mientras mis ojos se empañaban de nuevo
con los cristales que bajaban sin cesar.
Allí lo vi... el encantador caballero de mi amiga
bajaba en un coche blanco de cuatro patas
su relincho casi me espanta pues era soberbio y arrogante
más la melena la movía la brisa del mar
mientras allí estaban... todos sus anhelos
posados sobre un gran lomo brillante,
ataviado como el mejor de los marineros
con un gran ramo de rosas rojas
adornadas con orquídeas de Colombia...
Mi amiga no atinó a correr...
simplemente impávida y con la tez blanca
se desvistió ... no tuvo tiempo de arreglar mesa
de colocarse aquél vestido transparente
pues su amante marinero llegó casi corriendo
y con un gran beso que la hizo ver estrellas
simplemente... se desmayó.
¡Levántate mujer!...
escuchaba en medio de su ardor
¡¡son las 9 de la mañana!!
¿aún durmiendo en el mirador?
y mi amiga con aquélla gran sonrisa,
como quien no acepta que sólo fue un sueño
corre a vestirse apresurada...
lo más seguro es que la esperan...
aquél mismo señor, vestido de corbata
con una gran barriga y ediondo a tabaco urbano,
pero con una carta que dice:
¡¡está usted despedidaaa!!
RAQUEL
BQUILLA, OCTUBRE 8/11.
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