martes, 10 de septiembre de 2019

EL PICO

EL PICO

Ahí, en el lugar del pomarroso y del mortiño,
en el pico rocoso de la más alta montaña
en donde hallamos viejas espadas 
que aún se conservan en las manos
y fueron firmes para herir al venado
y lastimar al cerdo de colmillos grandes,

en ese lugar que parece el confín de todo
que al cerrar los párpados vemos más,
y todo es más lúcido y brillante que el sol
ante el madrigal;

fue en ese mismo lugar 
en donde mi pequeña cometa
se enredó en tu cuerpo de palmera 
y se varó en la oscura noche de tus ojos.

Ahí confié en promesas viendo a las estrellas,
imaginé el mundo lleno de mariposas 
que revoloteaban en mi estómago
y salían por la boca. 

Fué en ese lugar inhóspito
acompañados del canto del guacharacho
y la burla del mirlo
donde alguna vez conocí el amor.

¡Ahí estaba cruzando la peña!...
De loma a loma, envuelto en fantásticos aromas
y redondeado de todos los colores 
cual beso alargado de novia virgen
entrelazado en leguas de fuego.

Aún ahora siento lo mismo
si voy tan solo al Magdalena
pleno de almas solitarias
que rondan y rondan su orilla
buscando todo sin hallarte.

En tanto pasas cual ave solitaria
por sobre las aguas doradas
esperando tan solo una mirada...

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, 10 09 19



No hay comentarios:

Publicar un comentario