sábado, 31 de octubre de 2015

DEL AMOR [2]

Kevin viendo a su padre y primitos 

DEL AMOR [2]

Otra vez quise hablar del amor,
el mismo vicio que suena el ruiseñor
en su garganta de oro y plata,
pues entre un bosque de ocres alas
se esconde lo sublime y perverso,
lo mágico y sereno
del rocío sobre la grama.

Tiemblan otra vez mis labios,
¡es que de pensarte me volví poeta!,
engarzada cual pájaro herido entre zarzas,
pensando otra vez
en el colibrí de pico rojo
y verdes alas.

Una esmeralda fueron sus destellos
sombreando mis paisajes pálidos
o encendiendo la mirada,
al arrimo cansado bajo  un ciruelo,
de un viejo descalzo y desnudo
ahuyentado de su manada.

¡Oh amor!, tan dulce y lejano,
casi que de sal se hicieron mis versos,
pero en tu boca de artesano
un toche armó nido, bordado con donaire,
y  florecieron rosas en verano,
perfumando la tumba de un mochuelo.

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, octubre 31/15








No hay comentarios:

Publicar un comentario