ANOCHE 3 [65]
Dormir,
un suplicio, intenso calor, hasta que al fin no supe en qué momento abracé el
frío piso y me hallé en un sueño que parecía real.
Ibas
y venías a mis brazos, un alcahuete nos hizo sombra para que pudiéramos
amarnos, fue ahí escondidos, donde te dije: ¡eres mi poema!, y tú respondiste
con un beso tan enorme que todavía lo estoy sintiendo.
Anoche
mi amor, cesaron las angustias, una bata blanca, ¿por qué así?, luego comprendí
todo, siempre has estado en cada uno de mis sueños, no importa lo que pase,
jamás te has ido de mi corazón y ahí permaneces, en todo mi pequeño alfabeto
eres mi primera letra, donde inicio a conversar con el cielo y termino
tocándolo si estás conmigo.
Luego
jugabas con una bebé muy morena y gordita, parecía tu nieta, pero era
mía, comprendí todo, ¿quién inventó los sueños?, ahí estabas en cada uno,
aunque pasara el tiempo, en cada ciclo fuiste moldeado para mí, pero no lo
sabía, tenía que esperar un poco, más un trecho enorme falta para llegar
a tus brazos de nuevo.
¿Estarás
esta noche otra vez en mis sueños?
Raquel
Rueda Bohórquez
Barranquilla,
septiembre 3/15
No hay comentarios:
Publicar un comentario