¿Y
DON ESCROTO? [10]
Otra
vez quedó la casa vacía, pero viéndolo bien, está llena de luz, hay muchos que
me ven, y mi delirio desde que abro los ojos, es ver hacia mi ventana siempre
abierta, /no hay rejas/, y adivinar de qué lado saldrá el sol, aunque imagino
un día de lluvia, para éste calor que me toma en un descanso nuevo, en mis
repetidas necedades.
Hoy
no habrá poesía porque ella se pasea de rama en rama y se repiten sones, se
cantan amores y bendiciones.
¿Quién
se ha ido?, ¡nadie!, aquí estamos los que somos, y una fuerza nueva nos dirige,
un impulso lleva nuestra barca a puerto seguro, pero aquí entre nos y sin que
nadie se entere, me gustaría que estuvieras ahí, en un rincón de mi barca con
un ramo de flores, no me importa el color, ese lo inventamos nosotros porque
somos engreídos, el color de una flor no es tan importante como su aroma, y es
aquí donde quiero decir que providencia ajusta nuestro pequeño corazón a cada
día, imaginando que vendrá un mañana, pero mi mañana es ahora y ya, ¿quién lo
dijo?, no sería Don Escroto, porque ese tipo tan mala cara no lo soporto, ¿será
por la edad?, creo que sí, o porque se ha paseado por muchos antros y ésta
princesa bella, o sea yo, quiero un amor más puro, por eso me dirijo a ti, con
una medio sonrisa, ¿será?
Raquel
Rueda Bohórquez
Barranquilla,
abril 29/15
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