BUSCÁNDOTE
[11]
Cuando
veas que me fui para siempre, ¿será que me recuerdas?, o dirás: “el que se va
no hace falta, pero quien regresa, es como una ola buscando en la playa de la
indiferencia, un poema olvidado”...
Un
segundo imaginé ser un ave y volé con una prisa indescifrable, una búsqueda de
algo que no era hallado ni concebido dentro de mí.
Tu
orilla fue una playa que mojó mis alas con tus lágrimas, y fue el mar, ese
inmenso consuelo en aquéllas viejas melancolías que me hallan en ti pensando.
Dije
que había un parásito dentro de mí, que nos devoramos a nosotros mismos, que
somos entes raros, pero que dibujamos una aurora dentro de un paisaje donde
estamos, y nuevos versos abaten las olas con un destino igual que nos jugamos.
Estática
ante mi propia imagen, ¡qué bonita soy si me pintas con tus rayos!, hermoso mi
cabello virgen como plata, así entre mis brazos tú y yo, siendo una entre
la nada.
Y
te veo cuando muere la tarde, un tronco herido estaciona mi figura, eres
rey de gran hermosura y consuelo para el mar donde te he hallado,
y
reposo encontraron mis cansadas alas.
Raquel
Rueda Bohórquez
Barranquilla,
abril 28/14
No hay comentarios:
Publicar un comentario