ALIMENTO
[17]
Música para el espíritu, es verdad,
tenemos que alimentar el alma con aquello que necesita, alimentar los ojos con paisajes,
no todo lo debemos mirar, hay cosas que nos dañan y se quedan allá en esa
memoria fotográfica, alimentar el cuerpo con frutas y verduras, tantas cosas
hermosas que tenemos, mensajes positivos, estudiar el comportamiento de las
aves, ver cómo nace una semilla, y de a poco se convierte en un joven, en un
adulto, esperar sus primeros brotes, esas flores que nos dirán que mañana habrá
mucho para todos, que sus hojas cambian porque vendrán otras, y que no tenemos
por qué creernos dueños de todo lo que nuestros ojos ven, nada es nuestro, es
un préstamo, de ese gran señor a quien le llamamos Creador.
¿Qué consejo me doy?, tengo que
evitar hablar tanto, porque no es mentira, las embarro a veces, pero es que hay
cosas que nos mantienen con rabia, y esperamos la justicia divina, a veces
decimos que demora mucho ,y que a los malos siempre les va bien, pero hoy
pensé: debo mejorar, ser más noble y menos idiota, ¿para qué confío tanto en
las personas?, siempre te herirán, nadie te soporta cómo eres, siempre deseamos
a las personas a nuestro molde y queremos hacerlas de plastilina, que no
hablen, que no reclamen, que no se expresen, y muchos se alejan de ti porque no
te aceptan, y aquí en ésta parte dije: ¡Qué me importa!, debo amarme y
respetarme, ¿para qué la aceptación de otros?, me acepto, me amo, soy hermosa
por dentro y por fuera, me veo al espejo y las arrugas me lucen, son los
senderos recorridos que se marcan en mi piel, mis manos manchadas se ajustan al
trabajo del día, mi cintura cobijó 3 alondras, no puede estar como ayer, porque
el tiempo continúa, y soy bendecida porque se me ha dado la oportunidad de
mejorar, cada segundo que el Señor dueño de la vida me regale, es tan solo eso,
una oportunidad... ¡¡Heyyy, avíspate!!, ¿crees que porque eres anciano es porque te lo mereces?, simplemente
no has hecho la tarea, o estás un poco más para que otros aprendan de ti, apúrate,
porque en el momento de la sonrisa, sabré que hiciste lo que debías, y vendré
por ti, pero también será incierto el día, tienes unos segundos más, otros,
simplemente regresarán a casa porque aquí hay asuntos por cuadrar, y tal vez
sea verdad, regresaremos a éste lugar alguna vez, en medio del llanto de un
aguacero, o el fulgor de un rayo...
Me alimento de buenos amigos, de
ancianos buenos que me puedan aconsejar, porque todos los viejos no son buenos,
también hay malvados que se guardan en su ancianidad, pero tienen el alma
oscura, acato a los mejores, aunque no esté de acuerdo en muchas cosas que
atentan contra mi libertad, pero nunca un buen amigo te lleva por caminos
escabrosos, debes ser inteligente y absorber para tu vida lo mejor, como un
vino, así debes exprimir el zumo que ves a tu alrededor y cuando te des cuenta
has madurado y te convertirás en un ser humano valioso, envasado en el mejor frasco
de todos, tu propia alma, en un cuerpo que debes amar y cuidar porque es un
préstamo para guardar ese tesoro invisible.
Me alimento de una noche maravillosa,
y copio el consejo de los animales, que sin hablar nos enseñan la tarea, al
igual que los árboles, la lluvia, los tesoros que tenemos abandonados a nuestro
alrededor.
Alimenta tu espíritu, y mañana darás
de tu alimento valioso a los demás, eso me lo dijo una hormiga, cierto día…
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, enero 7/15
®
10-491-97
No hay comentarios:
Publicar un comentario