A LA MUJER
[66]
Hay una reina que ocupa el centro de mi
universo,
En medio de recortadas flores agité mis manos
al viento
Atrapé semillas para mis amores, y fue tal mi
contento
Que la tarde triste, fue mágica cortesía,
Entre luceros y luces
Al asomo de otro día...
Hay una princesa a quien las hormigas besan y
acarician
Razón tenía el sembrador cuando no equivocó el
surco
Sembró amapolas y no arañó su piel,
Fue manso el río, y culebra fría quebrada,
Perdiz que tomaba lo que caía
Mujer tan solo en medio de una lluvia
vespertina.
Hay una diosa en cada jardín...
No esperes que sea una rosa tan solo
Tiene una coraza con espinas que hieren,
Y perfuma sin remedio más cuando muere.
Hay una mujer en cada montaña,
Como un árbol lleno de flores y frutos
Semilla, frágil y condenada a la hermosura
Pisoteada algunas veces por el marinero
errante
Pero amada, como la vida misma
Cuando el manantial asoma
Regalando al paisaje tímida hermosura.
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, enero 16/14
© 10-491-97
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