martes, 9 de diciembre de 2014

SI ACASO

Imagen: Liz Nayibe. 


SI ACASO
Adivinando voy un camino cierto
Grandes gajos de uvas de colores
Mariposas miles, flores por montón,
Hilos de seda donde las orugas entretejen amores
No espinan los cardos, tan solo adornan
No hieren las rocas aunque descalza camine.

Hay una estrella que se quiere descolgar
Aprisa, ¿hacia dónde va?
Ha de caer en un lago azul marino
Será la roca donde los payasitos dancen
O será el aroma de una flor de morena piel.

Adivino tus ojos, ¿qué se puede vencer ante el sol?
Eres de todas las flores la esperanza
De todas las madres dulce espiga en un llano
A donde un zorzal adivina un plenilunio 
Y versan sus amores un nuevo amanecer.

¿Qué temes?, nada... La palidez retorna 
Pero arriba de todo, entre los ojos se ha colado una luz
La inmensidad es una promesa 
La noche adivinará nuevas estrellas
Un aura será un día, un segundo
Sin importar el tiempo, ni lo perseguido.

Atrapa en tu mirada que viene la voz
Te susurra al oído, te quiero mi amor
Vamos a navegar tomados de la mano
Hoy serás mariposa, mañana ruiseñor,
Pero es seguro que no llorarás,

Porque en el silencio 
El grito más angustioso es escuchado
Y tú eres de las mías, mi flor escogida
Divina, resplandeciente, arrullada en mí
Como una oveja en el campo
Tomando leche fresca y tibia
Con la boca llena de espuma
Balando tan solo para el Rey.

Relájate, tranquila…
Que no te asuste el ruido del día
Ama el aroma de las flores
Porque ahora, eres eso…
Un perfume  que se eleva
Una rosa de luz que nace en mi huerto
Regresando a casa mi niña bonita
A dormir en una colcha de luna y plata
Adorno de cielo como luciérnaga
Beso en cualquier tarde,
Hoja nueva y reluciente
Retornando a mi árbol una vez más.

Raquel Rueda Bohórquez 
Barranquilla, diciembre 9/14

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