sábado, 19 de julio de 2014

DESTELLOS

El cabello del perrito se parece a la viejita. 

DESTELLOS

A veces parecemos un jarrón cuarteado, la piel se destiñe y se arruga, nos convertimos en senderos, en caminos y rutas marcadas en el corazón, que se curten en la piel.

A veces creemos que si el cabello se viste de pálidos destellos estamos acabadas, y buscamos la manera de vernos lindas, y con un color nuevo nos sentimos aliviadas, pero al rato, la corona pálida retorna, como las palomas a mi balcón.

A veces buscamos la juventud y dañamos el rostro, destruimos los caminos de la vida señalados en la piel, y quedamos vacías, con un rostro que no es el nuestro.

Más no importa cuántas veces luchemos por parecer lo que no somos, hay algo que se queda temblando en la mirada con un brillo, que será reconocido por todos los que han caminado a nuestro lado.

Me quiero como soy y lo manifiesto, no quiero parecer una estrella para que otros crean que ilumino sus caminos, sólo quiero ser la oveja desgreñada que pasa por ahí buscando verdes prados, y un suave olor a jazmín que se ilumina, con el resplandor de otros.

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, julio 16/14

No hay comentarios:

Publicar un comentario