EN LA PRADERA 2
Miren como retozan mis niñas por la pradera
¿Aquí es donde dices Señor, que está mi paraíso?
Al ser explotados por quien debiera amarnos
Libres como el viento, iremos cualquier tarde.
No hay diferencia entre la cárcel y mi amor
Prisionera vivo de ilusiones
¡Si me soltara las cadenas!
Sería como ellas, feliz danzando por los verdes
Corriendo entre el trigo húmedo de tus labios
Arrinconada en el sendero de tu pecho.
Cuando abrí su cárcel a las aves
Algunas regresaron a mi hogar…
Triste saber que también fui su carcelera
Ahora, si me quieres… me entrego a las rejas
De tu corazón.
No hay derecho, ¿qué somos realmente?
Distamos de ser humanos, pues bestias parecemos…
¡Mírenlas!...levantan polvaredas al viento
A donde alguna vez seremos verbo y sustantivo
¿Pero quién lo entenderá?
Estamos ciegos aunque los vemos confundidos
Estamos sordos, aunque escuchamos sus gemidos…
Acércate un poco hasta mi frontera…
Será la línea divisoria que nos separa
Pero aquí, donde la libertad tiene alas
La única línea es invisible, cuando se ama.
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, febrero 12/14
¿Aquí es donde dices Señor, que está mi paraíso?
Al ser explotados por quien debiera amarnos
Libres como el viento, iremos cualquier tarde.
No hay diferencia entre la cárcel y mi amor
Prisionera vivo de ilusiones
¡Si me soltara las cadenas!
Sería como ellas, feliz danzando por los verdes
Corriendo entre el trigo húmedo de tus labios
Arrinconada en el sendero de tu pecho.
Cuando abrí su cárcel a las aves
Algunas regresaron a mi hogar…
Triste saber que también fui su carcelera
Ahora, si me quieres… me entrego a las rejas
De tu corazón.
No hay derecho, ¿qué somos realmente?
Distamos de ser humanos, pues bestias parecemos…
¡Mírenlas!...levantan polvaredas al viento
A donde alguna vez seremos verbo y sustantivo
¿Pero quién lo entenderá?
Estamos ciegos aunque los vemos confundidos
Estamos sordos, aunque escuchamos sus gemidos…
Acércate un poco hasta mi frontera…
Será la línea divisoria que nos separa
Pero aquí, donde la libertad tiene alas
La única línea es invisible, cuando se ama.
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, febrero 12/14
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