SIN
MI JUGUETE [104]
Si
me quitan las páginas en blanco, nada queda...
Es
mi pequeño juguete guardado con celo
en
donde abonan mis lágrimas sus quejas,
y
mis labios se entretienen.
Al
abrigo de cualquier sombra me cobijo.
Que
nada turbe mi inocente calma,
que
nada enfríe el calor de un día,
si
vacías quedan las cigarras.
Y
la escuché cantar, era un agudo llanto.
Lastimaba
mis oídos su dolor
y
una gota transparente,
donde
su imagen se copiaba
se fue nadando despacio,
para
quedarse ahogada
en
el infinito azul.
¿A
dónde vas acaso?
¡No
te apures!... espera un poco...
Tal
vez en un rescoldo de una roca
aprisionada
vivas un segundo más,
o
una brisa tempranera te sacuda
para
que sigas, tan incierto continuar.
Raquel
Rueda Bohórquez
Barranquilla,
noviembre 8/13
No hay comentarios:
Publicar un comentario