¿RECUERDAS
A FLOR? [116]
Oye
lucía, ¿recuerdas a Flor?
Sí
ella, la de trencillas doradas,
la
que siempre parecía estar llorando
y
sus palabras se enredaban.
Me
dijo alguna vez que no era virgen,
pero
que siempre conservó sus primaveras,
que
adornaba su belleza por doquier,
aunque
nadie la quisiera.
¡Qué
tiempos aquéllos! /eran más dulces que ahora
¡Qué
vaina cuidar tanto una flor, para que nadie la toque!
Pero
siempre fue mejor que éste momento loco
donde
ellas se abren, ante cualquier lirio travieso,
y
su valor de ayer de conservarse un rato
ya
nada importa.
Ahora
somos todos iguales…
Nadie
nos quiere por ser botón o rosa abierta,
podemos
escoger entre mil primaveras
para
finalmente quedarnos solas en la rivera.
Ciertamente
era mejor ayer…
Pero
acaso, ¿todas conservaron esa mal llamada honra?
No
se nos amó por ser mujeres sino esclavas.
Querían
todo para ellos, y con eso se arropaban,
para
que fueran sus tiempos de machos cabríos
donde
éramos sus cosas, y no sus damas.
Pero
a pesar de todo
me
quedo con el tiempo viejo
donde
la mujer declamaba versos al viento
y
se guardaba con el bebé en su aposento,
todos
los días después del parto,
para
cuidarlo y protegerlo de los malos tiempos.
No
importaba si era gorda o flaca,
si
tenía pechos de vaca o de ternera.
Valía
para ella el amor a su familia,
y
por ella entregaba su vida entera.
Me
quedo con esos tiempos,
los
de ahora, un poco de pena me dan,
pareciera
que buscando mucho se perdió todo,
y
la virginidad es una locura pasada
que
hoy, se convirtió en invierno.
Un
capullo a nadie le importa
más
si, disfrutar el instante
y saborear
a carcajadas el momento
como
un exquisito vino.
Raquel
Rueda Bohórquez
Barranquilla,
noviembre 6/13
No hay comentarios:
Publicar un comentario