HAY
DÍAS [31]
Hay
días que no podemos dormir, entonces me levanto temprano, no me gusta estar
rendida en la cama como una morsa si hay tanto por hacer y aprender.
Me
gusta ésta música, tiene un mensaje siempre de amor, todo es positivo, no se
denigra de la mujer, sí tanta bulla que
dicen llamar música, con unas danzas muy feas que incitan al sexo desde niños,
todo a su debido tiempo, y las mujeres no tenemos por qué prestarnos a bailar
esto, y menos, permitir que nuestros niños lo hagan, me refiero al golpe, lo
último asqueroso que se han inventado, de ahí tantas jóvenes que están soltando
la teta de la madre para poner la propia, no se terminan de criar cuando ya lo
están haciendo, no es una experiencia bonita tener hijos demasiado jóvenes,
pues los niños terminan siendo un estorbo, para los planes de los padres
inmaduros que les tocaron, y se convierten en víctima de la irresponsabilidad.
Veremos
cómo continúa el día, lo único, es que siempre agradezco a mi Jefe amado por
cada segundo de vida, por lo que pueda sembrar y recoger, y le pido que no me
vaya llena de odios y resentimientos con nadie, la vida no ha sido fácil, pero
nunca miro hacia arriba, hay personas a las que les toca peor, y bajo ellas
siempre habrá muchas más.
Ahora,
con las brisas de diciembre, muchos hogares están sin techo, nosotros tenemos
una aparente seguridad, y como está el medio ambiente, es una seguridad de sueños
intranquilos para todos.
Bendiciones,
y un domingo lleno de alegría, si no tenemos a donde ir, es mejor quedarnos en
casa, aprovechar para orar un rato, escuchar música y pasarla bien.
Raquel
Rueda Bohórquez
Barranquilla,
noviembre 24/13
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