martes, 7 de mayo de 2013

VIOLINES (147)

VIOLINES (147)

Lloran las cuerdas de un violín,

así mi corazón día a día, mi reina,

a cada paso de ave, a cada trino...


Entonces, compungida una vez más:
¿Puedo acaso olvidar que no has regresado
que tus versos, de preguntas sin respuesta me toman de nuevo,
que me desnudo, grito, y chillo al viento?...



Me acobarda la soledad y huyo de ella.

Busco en tus verdes ojos, esperanza mía: un consuelo.

Pero has marchado de mi alar, golondrina blanca;
me has dejado en el rincón de los silencios
sin saber qué camino seguir.

Escucha madre, escucha a mi corazón:
Tiene lágrimas anémicas que rebotan,
se oscurecen con un nuevo día las alcobas,
se enfría el nido de tus brazos
y agonizo lentamente sin tu amor.

Raquel Rueda Bohórquez

Barranquilla, mayo 7/13 

No hay comentarios:

Publicar un comentario