MAMÁ GANSA (55)

MAMÁ GANSA (55)

Mamá gansa se fue a nadar

con sus hijitos en altamar.

Una barquita me consiguió

de color dorado como el sol.

¡Mamà gansita! /dijo el menor:

¿Será que puedo tocar el sol?

¡Mira su brillo sobre las nubes!

Y cuando llueve,

 ¿por qué se pierde?

Mamá gansa no respondió

abrió sus alas y se bañó

y el patito enojado

tomó la barca y se largó.

¡Mamà gansita! /dijo el menor:

¿En esa barca donde se fue

también lo visita la luz del astro?

Pero la vieja no respondió:

extendió sus alas y voló y voló…

Trajo al gansito desobediente

y le replicó a los dos:

El sol nos baña y nos abriga

también nos besa o nos fustiga,

pero de todos, Él nos da vida,

es un tesoro que Dios prodiga.

Mamá gansita no habló más,

con sus patitas se fue a nadar

y los gansitos en procesión

la persiguieron sin ton ni son…

Raquel Rueda Bohòrquez

Barranquilla, diciembre 9/12