Publicado pors en enero 8, 2011 en 4:00pm
COLIBRÍ/A mis hijos (196)
COLIBRÍ/A mis hijos (196)
Colibrí que te
vistes
cual tiernos
olivos,
tus andares veloces
son estrellas
fugaces.
Y te adornan las
piedras
más preciosas del
cielo,
abrillantando tus
alas
y tus ojos de
nácar.
Extasiada te
admiro,
si a veces me ves
con tu rauda mirada
que se pierde
contigo.
Colibrí que me
besas
tan veloz como un
rayo,
y te llevas por
siempre,
mis suspiros
contigo.
Tienes vida en tus
alas,
llevas fuego que
abrasa,
y me suspiras quedo
con tus aires
lejanos.
¡Primor no te
pierdas!
Regálame un instante,
ya que al irte
imagino,
que es Dios quien
te llama.
Y me enciendes a
versos
que me vuelven
poeta,
y me inflamas de
amor
con tus raudas
pasadas,
estampando en mil
flores
tus anhelados besos
con el suave aliento
que brindan tus
alas.
Eres tú tan pequeño
pero tu estampa es de
gigante,
que atesoras
cantares,
pintores te
estampan,
me inspiras tonadas
y oraciones al
cielo,
que se llena de
estrellas,
con tus raudas pasadas.
Pajarito que en vuelo
alegras al hombre,
enterneces las
flores
con tus besos
dorados,
y perfumas tu
aliento
con sus aires de
hadas,
y las dejas por
siempre
de ti enamoradas.
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, enero 8/11
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