viernes, 24 de junio de 2011

¿PORQUÉ ME CAES GORDO? (2)


¿POR QUÉ ME CAES GORDO? (2)

¿Quién nos entiende?, hoy es un día de esos en los que me pregunto: ¿qué hice, qué dije, cuál es el motivo?, tantas veces sin proponernos algo, herimos a alguien, decimos algo que el receptor interpreta mal, o simplemente la sola presencia de alguien nos fastidia. 

Tantas veces me lo pregunto y otras, quedo con la inquietud de las veces en que alguna palabra mía haya podido disgustar a alguien sin haber tenido siquiera la mínima intención de hacerlo. 

A veces no son las palabras, puede ser nuestra falta de glamour, como dicen muchas encopetadas, yo no vivo de éstas cosas, mi vida ha sido básica y simple, no me entretengo en éstas liviandades. 

Pero sí quiero compartir que mi manera de ser tal vez moleste a alguien que no me conoce suficientemente. Soy dada a las bromas y éste problema mío heredado, pues es así, me ha causado uno que otro problema y siempre quedo pensativa: ¿qué  dije? ¿qué hice?

En el momento he tratado de volverme algo reservada, pero es que no aguanto la hipocresía en mi vida, me gusta mostrarme como soy con todo el mundo. Las personas que me conocen desde mi niñez saben como soy, a qué atenerse conmigo. Esta costumbre de bromear a tiempo y a destiempo sin proponerme dañar a nadie ni burlarme de nadie, aleja un poco, pues soy muy receptiva a las críticas o al más mínimo comentario donde me crea sentir afectada, no he podido manejar ésta situación en mi vida, he debido ser tratada por más de un psicólogo.

En mi convivencia con mi pareja, el aguante que he tenido para sobrellevar asuntos tan tristes y pesados que cualquier otra persona no hubiera podido soportar , ha sido debido a mis bromas. 

Cierta vez llegó mi esposo enfurecido, gritando envenenado, "tal vez no le funcionó con la chica de turno", le dije  en son de broma, y parece que dí en el clavo pues se enfureció más, a tal punto que creía que me iba a maltratar físicamente, aunque gracias a Dios hasta ese punto no llegó, pero sí recordé algunas palabras de mi madre "cuando alguien está endemoniado, no hay nada mejor que echarle agua bendita", ¡jajajaja! lo recordé al instante, pero ya la tenía preparada pues siempre andaba con el demonio adentro y éste día decidí que pasara lo que pasara lo iba a echar de mi casa. 

Fui por la copa de agua bendita, y cuando empezó a maldecir y a gritar sin motivo, le lancé la copa de agua sobre el rostro y dije : ¡apártate satanás que a mi casa no entrarás... porque el día de la cruz dije mil veces JESÚS, JESÚS, JESÚS!, y amigos, les cuento que ¡funcionóoo!... quedó parado impávido mirándome a los ojos, no sabía si era un toro herido o un león a punto de abalanzarse sobre su presa, yo sólo esperaba con un ataque de risa que no me lo paraba ni el diablo.... ¡jajajaa!, ese es mi problema tremendo, pero en ésta ocasión como en muchas otras cuando empezaba a maldecir y a gritar palabras hirientes yo empezaba a orar en voz alta, a la vez con sus gritos:"el Señor es mi Pastor... nada me falta... etc etc..", mis hijos también aprendieron mis mañas y cuando me pongo muy cansona a ratos a darles cantaleta, también dicen la oración, ésto enseguida me calma y me hace sonreír... "hijo de tigre, sale pintado, hijo de fara... rabipelado".

Bueno amigos, pues la realidad del asunto es que si alguna de mis bromas cibernéticas o sonrisas a destiempo han sido malinterpretadas por alguien, pues públicamente pido disculpas, voy a tratar de contener mis malas mañas, aunque dicen que "loro viejo no aprende a hablar", pero por el cariño que les profeso voy a tratar de hacer la tarea bien.

A veces pueden mis palabras ser interpretadas como una burla cuando en realidad no hubo ni la más mínima ni mala intención en ello, pues esa palabra no existe en mi vida, nunca me burlo de nadie a sabiendas de que sí  he sido  el foco de burlas de las personas más allegadas y que más daño me han causado durante muchos años y sé lo que ésta palabra representa y el daño psicológico que puede causar en alguien.

Hoy quería compartir ésta inquietud, dejarles un poco de mí en la página, un gran abrazo para todos, y no lo olviden nunca, siempre debemos decir que amamos a alguien, pero por favor, que las esposas no se lo tomen tan a pecho, amores virtuales generosos, dadivosos llenos del amor de JESÚS siempre en nuestros corazones.

Raquel Rueda Bohórquez 
Barranquilla, junio 15/11.

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