Miércoles,
13 de mayo de 2015
¿QUÉ
DECIR? [35]
Dios,
¿qué decir?, muda quedo y ni un verso toca mis alas, pero una oración llena mi
boca, al adivinar sus ansias mudas de teta fría y pálida, de ojos que
no ven, de ánimo, que se volvió hielo entre los dedos.
Bebé
chimpancé corriendo sobre su madre muerta ¿qué pasa?, pero responde un silencio,
y esa espada vieja, entra en depresión conmigo, y enmudecemos las dos, nos
violentamos tanto que nos matamos juntas, nos volvimos espuma besando una roca,
y el mar nos canta al oído esa canción de cuna que a descansar provoca.
¿Quién
mata la vida?, ¡y si no muriéramos!, ¿si flotáramos siendo aroma sobre los
lirios, o hierbabuena aliviando alguna pena?
Pasan
los demonios, se llevan todo a su paso, tienen olor a petróleo, pero un hombre
quien guía el velero extraño de su infortunio, sigue, parece que ríe, ¿o será
que canta?, los he visto pasar sobre mis niños descalzos que desean buscar su
bosque perdido.
Ausente
amor, ¿en dónde estás?, ¿ya no ríes de mí?, ahora te paseas con una sonrisa nueva,
hay lustro en tus ojos, ¡qué bonito es el amor cuando es de veras!, ¡que
lluevan lágrimas sobre las azaleas, mientras veo a mi amor pasar de la mano de
otra, y espero un cofre de madera bañado en rosas blancas.
¿Qué
decir cuando se mata la vida?
Raquel
Rueda Bohórquez
Barranquilla,
mayo 13/15
No hay comentarios:
Publicar un comentario