COMO UNA MARIPOSA L1R
Sí, quiero, yo también bailaré esa danza,
al amanecer, cuando el sol castigue al mediodía,
cuando el ocaso… ,
inclusive cuando se haya ido
a visitar a otros bosques y montañas
y quedemos los tres, tú, la luna y yo,
con las envidiosas estrellas.
Me gustaría ahora, con el pensamiento
visitar la cumbre de tu pecho y amar tus flores
quedarme en tu cuello y beber miel de tus labios
despacio, sin afán.
Quiero danzar como ellas, como las hojas al caer
tan suavemente que nadie me sentirá,
y luego, cuando el cansancio nos venza
a mi jardín retornar.
Déjame ahora, no sé si mañana aparezca
moveré mis alas dulcemente
no soy ni tan brillante ni tan pequeña,
sólo soy una mariposa blanca
que se pasea por tus ojos y no quieres verla.
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, mayo 9/14
al amanecer, cuando el sol castigue al mediodía,
cuando el ocaso… ,
inclusive cuando se haya ido
a visitar a otros bosques y montañas
y quedemos los tres, tú, la luna y yo,
con las envidiosas estrellas.
Me gustaría ahora, con el pensamiento
visitar la cumbre de tu pecho y amar tus flores
quedarme en tu cuello y beber miel de tus labios
despacio, sin afán.
Quiero danzar como ellas, como las hojas al caer
tan suavemente que nadie me sentirá,
y luego, cuando el cansancio nos venza
a mi jardín retornar.
Déjame ahora, no sé si mañana aparezca
moveré mis alas dulcemente
no soy ni tan brillante ni tan pequeña,
sólo soy una mariposa blanca
que se pasea por tus ojos y no quieres verla.
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, mayo 9/14
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