HISTORIAS DE LA VIEJA PACHA/Oración de San Miguel (27)

HISTORIAS DE LA VIEJA PACHA/Oración a San Miguel (27)

Casi olvido de ayer, 18 de septiembre, mientras escuchaba con mucha devoción el exorcismo de San Miguel, hay una parte en donde expulsa seres que están haciendo daño en nuestra vida y hogar, entonces cerré los ojos, inicié a escuchar muchos gritos, casi diría que alaridos de mucha gente que sale huyendo, eran muy lejanos esos gritos, esto fue a una hora que ahorita reviso, pues enseguida subí ese video a Internet, aguanté el miedo, y permanecí con los ojos cerrados, cuando el sacerdote decía ¡fuera!, ¡fuera!, sentía esos sonidos, pero lejanos, como entre un murmullo de muchos seres, con un sonido parecido a ese que aparece en mi video, burbujas de aire muy denso...

Luego de la bendición decidí pasear por mi casa y regar agua bendita por todo lugar, anoche dormí como nunca antes había dormido, delicioso, ya no vi a esa anciana en mi propio espejo, era yo, me querían ver así, o que me viera en ruindad, pero verme anciana ha sido un privilegio, pues no seré tan fea, sino una abuelita preciosa, muy pálida pero con mucho brillo y picardía en su mirada.

He sentido energía pesada, no pienso en ello, pero de un momento a otro, un frío a mi espalda, eso sentí esta mañana cuando cocinaba, estaba haciendo calor y esa brisa se colaba por entre la blusa, como si estuviera el aire acondicionado encendido.

Mi sobrina Karen vino hoy a contarme que si había escuchado gritos ayer, muchos alaridos, cerca de mi casa, pero esto fue anoche, le conté de lo que me sucedió y parece que no es en la única casa donde suceden cosas raras en este barrio, mi amigo Máximo me ha confirmado varias cosas, ¿qué será?, hay mucha gente que practica brujería y cosas y deja esas energías en las casas, pero con oración, ayuda y mucha fe, vamos a permanecer en mi casa, no me quiero mudar de aquí pues tendría que salir de mis perritos y esto me causa mucha tristeza.

Según mi sobrina, parece que estaban practicando un exorcismo a una chica, ¡mmm!, me suena que es donde Luigi, ¡jajajaja! o sea que no es mi casa la encantada, hay muchas casas rarongas en mi sector, ¡yo veré! ojalá encuentre una guaca porque necesito dinero para poner hermosa mi mansión.

Raquel Rueda Bohórquez 

Barranquilla, noviembre 19/15

MIS MUÑECAS (28)

MIS MUÑECAS (28)

Tengo dos muñecas:

La una tiene ojos azules,

Y cuando se enoja

Se vuelven violetas.

Tiene el cabello rojo

Pero se antoja en negro,

La boca más coqueta.

¿Será que a una rosa

Robó dos pétalos?

La otra, es de ojos negros

Cabellera negra

Como si la noche envidiosa

En sus perlas donara una estrella.

Son mi motivo para sonreír

Y juego con ellas si felices pasan,

Pero si enojadas están,

Las castigo con mi loco danzar.

Se miran, no pueden aguantar

Esas carcajadas de otro día

Ni esos abrazos de otra tarde.

A ellas en sitio de honor guardo.

Mi corazón es una rosa púrpura

Que va por sus propios ríos

Con la tibieza de un abrazo

Y un beso de madre.

Raquel Rueda Bohórquez

Barranquilla, noviembre 19/15

MIS CAROLINAS (29)

MIS CAROLINAS (29)

Debo limpiar mi camino, es una tarea que me dejaron.

Ahora vienen a mi memoria mis amadas aves, que por mantenerlas prisioneras, fui prisionera con ellas. En una gran jaula criaba cacatúas, tenían algo más que amor de mi parte, todas por alguna razón criaban en cautividad, hasta los canarios costeños, porque tenían espacio para volar y buen alimento, también ahí tenía pericos fischer de varios colores, que Serbio me había regalado y que también se habían multiplicado.

No gasté mi gran fortuna en pájaros ni en perros, para que de una vez cierren ese pico sucio, perdí mis llaves acabándolas de entregar a una persona, íbamos de paseo, pero en medio de su mala cara, me alegaba que me las había devuelto, pero esto era una gran mentira, lo cierto de todo, es que al regresar de mi paseo, no había una sola de mis aves.

Quedé sumida en profunda melancolía, se las llevaron para venderlas. Veía desde la ventana su rostro a punto de carcajada tratando de disimular su alegría, y pensé: esa mujer tiene un demonio adentro, vive llena de odio y envidia.

Tiempo después, arreglando cosas, botando chécheres, al lanzar un maletín de cuero, sonó algo como monedas y enseguida bajé a revisar, nada por ningún lado, pero había un pequeño hueco y por ahí revisé, para mi sorpresa: ¡mis llaves!, ahí estaban, no tengo por costumbre mentir, mi presentimiento de quién robó mis aves, quedó confirmado, hubo un cómplice y ella las dejó a mano.

 Ahora mismo suelto ese atoro de mi corazón, y también suelto a esas personas que tanto dolor y mal me causaron, que Dios bendiga siempre sus caminos por donde quiera que estén, pero no quiero verlos de nuevo por mi casa, no son bienvenidos.

Raquel Rueda Bohórquez

Barranquilla, noviembre 19/15

SACANDO ESPINAS (30)

SACANDO ESPINAS (30)

Cierta vez, la Vieja Pacha fue joven, y de eso hace ¡auuuu!, salía muy bonita para su trabajo en un banco, con un traje blanco con pequeñas flores bordadas en el cuello, se estaban usando los pantalones enterizos, como ahora. Las modas van y vienen como las olas. Trabajaba muy cerca de ahí, pues vivía en casa de un señor a quien apreciaba mucho, y que todos le decíamos "Porritas". En éste hogar estuvo viviendo la vieja unos años, también sucedían cosas, pequeños ruidos, pero sentía enorme aprecio por estas personas.

Porritas falleció hace unos años, pero tuve la fortuna de verlo de nuevo y abrazarlo.

Camino al trabajo sale una camioneta cuatro puertas, de esas que usaban mucho esas personas que andan en negocios "raros", sentí su mala intención y esa energía pesada, sospeché lo que haría, pero no tuve tiempo de correr y me fui despacio, pegada de la pared, él también venía despacio en su carro, era joven, tal vez 25 o 30 años, luego, cuando estaba cerca de un gran charco sucio de alcantarilla, aceleró el vehículo y me empapó toda con esas aguas negras, sentí mucha ira y tristeza, en tanto él me miró y reía a carcajadas. Era la primera vez que veía a ese tipo y entonces maldije a ese hombre, ¿para qué digo que no?, le dije igual que al viejito que mató a mi perrita, ¡ojalá se muera, perro hijueputa!

Y se murió, al otro día recibo la noticia de que lo habían asesinado esa misma noche. Esto me consternó mucho, y es otra puntilla oxidada que va saliendo, en verdad que la palabra tiene poder.

Diosito perdóname, que éste hombre no haya muerto por mi culpa, y estoy aprendiendo a frenar mi bocaza, porque se siente horrible saber que una palabra puede significar demasiado, entonces debí limpiar mi rostro y correr a cambiarme, tenía suficientes trapos, esa broma me costó mucho remordimiento después, pero ahora no siento nada, no fue mi culpa, no me conocía y sin embargo me causó daño, falta ver qué deudas tenía y se las cobraron, así es la vida.

0 y van 2

Raquel Rueda Bohórquez

Barranquilla, noviembre 19/15

SI UN DÍA (31)

SI UN DÍA (31)

Si acaso un día tu barca se vara

¿Qué importa, si es por tu bien?

No sabemos razones y penas

Si una brisa a la orilla nos lleva.

Entre gritos ayer se mudaron

Los espantos que habitan mi casa.

Pero afuera hay muchos que pasan

Y en sus negros ojos hay amenaza.

No te afanes si tu barca se queda,

Hoy será un día de fiesta,

Un niño canta en mi árbol

Y en mi barca, sales del mar quedan.

Al rato veremos que será día de lluvia

Que el arco iris nos visitará luego,

Si el sol en su empeño nos ama

Y nos abraza con su lámpara de fuego.

Raquel Rueda Bohórquez 

Barranquilla, noviembre 19/15