viernes, 19 de junio de 2015

A UNA VISIÓN [12]


Viernes, 19 de junio de 2015

A UNA VISIÓN [12]

Pueda ser que no veas nada, pero vi un águila, luego unas palabras se formaron en medio de un camino, estela de una nave que iba cargada de sueños, al segundo, el águila no estaba, pero estabas tú amor mío, leyendo un mensaje donde se hablaba de un amor, que sólo podemos comprender cuando veamos hacia las alturas, y nuestros pensamientos se conjuguen como un verbo.

Escuché cuando un ave azul le dijo a una blanca: ¡te quiero!, ¡te quiero!, para adivinarlos luego con el pico lleno de hilos dorados, y en una esquina mágica, fundaron una iglesia,  una congregación de pájaros salió a brindar honores a la lluvia, que los hacía despertar, en medio de sonidos de besos entre las hojas.

¿Qué será ese cántico?, vieron entonces cómo caían del cielo miles de joyas, que con los rayos del sol, brillaban más que diamantes, una a una fueron cayendo, otras se quedaron adornando una flor, o una hoja, que requería de sus caricias.

En ésta visión estaba mi vida, de un lado se habían mudado todas las hojas, un ciclo se había cumplido, y del otro lado, había una promesa de verdes, cargada de flores y frutos. Ahí mismo vi que había una junta de colores y gladiadores, que besaban las flores amarillas y se hacían cómplices de las mariposas doradas de Gabo, que a su vez, se volvían amantes de los pájaros negros, que se transformaban en azules, cuando el astro rey tocaba sus plumas.

Era una visión preciosa, ahí estábamos los dos, fuimos hilo de una cometa que se deshizo con el viento, luego nos disolvimos en un abrazo, nos volvimos alas blancas y nos alejamos del ruido presente, para hallar esa paz soñada un poco más allá de donde nace el color, y las visiones se convierten en realidad.


Raquel Rueda Bohórquez 

Barranquilla, junio 20/15

¿QUÉ AFÁN? [13]

¿QUÉ AFÁN? [13]

Nadie se irá sino cuando Él decida, ¿quién será Él?, todos sabemos que es un poder superior a nosotros, y que somos pequeños granos en el universo; a su antojo, una brisa nos traerá por una tibia cañada, también otra brisa nos alejará de éste divino planeta, pero seguiremos siendo parte del universo, ¿para qué nos afanamos por la muerte?, llegará cuando debe llegar, es un camino largo de aprender, estoy en esa tarea.

Desde muy niña me inquietaba por saber quién moriría primero, si mi padre o mi madre, y lloraba mucho pensando en eso, ahora lo sé, pero no deseo saber quién será el próximo, lo más seguro es que si soy yo, no será mi decisión, sino la de mi amor más grande de todos, mientras tanto, sigamos bailando y cantando, porque de llorar me estoy agotando.

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, 19 junio/15

A TI AMOR [14]

A TI AMOR [14]


¿A quién escribiré un poema?, entretenida estoy entre las amapolas y el verde del bosque; escucho sones que parecen de amor, suaves aleteos dejan suspiros entre las flores...

¿A quién cantaré un verso si no estás?...

¿En qué bosque está el amor que enredó entre sus dedos mi cabellera suelta?, mi pequeño poeta, una nube azul se ha crecido, y se ha vuelto lluvia en mis ojos, sigo en ti pensando, a pesar de que la tempestad ha pasado.

Ahora se mueven las hojas secas, van y vienen con la brisa, ¿y tú amor?, ¿por qué de mí te escondes?, es mi corazón una flama encendida que desea salir a encenderte, en medio de repetidos abrazos y sonados besos.

Aquí estoy, otra vez soñando, de nuevo pensando que hay retorno a un ayer, y que volverás a doblar la rodilla, en tanto declamas para mí un poema.

Pero te veo gigante, cada vez que te recuerdo así, se crece un océano en mi alma, y sus olas caen y caen, mojando éste vestigio de vida que aún suspira por ti.

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, 19 junio/15




MI PINTOR [15]

Gian

MI PINTOR [15]

Me sorprende tu gracia,
cada segundo
en éste palpitar de viejo corazón.

Parece un cardo Guajiro en flor,
serenata de besos y cantares.

¡Qué divino es el amor!

Joyas van y vienen,
vuelan a nuestro alrededor.

Hemos descubierto acaso
¿cómo se entretiene mi Señor?


Raquel Rueda Bohórquez

Barranquilla, junio 19/15

SI DEJA DE LLOVER (16)

SI DEJA DE LLOVER [16]

De nuevo hubo lluvia, buena voluntad,
aromas miles fueron verbo y poesía.

Un gladiador abrió sus pequeñas alas
y fue coraza en su corazón, un ánimo,
que le impulsó a volar hasta tus rosas.

¡Grita!,
llora si quieres cuando avistes un águila,
se van poco a poco,
desaparecen como las montañas.

Pero nos iremos también
en el instante de la carcajada,
o cuando deje de caer rocío
y el sol tiña de magia
nuestra cara pálida.

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, junio 19/15








HAY [17]

Bebés de Nena 

HAY [17]

Hay una sorpresa en cada invento,
una alegría en cada mirada,
un poema en cada línea que cruza el cielo,
y éste te quiero en el viento para ti, amor,
musa mía atrapada en mi corazón.

Hay un árbol que siempre nos da sombra
y otros, que dejan pasar la luz del sol
para tocar con sus besos a las más pequeñas.

Hay una sorpresa al despertar
y otra al dormir,
una hoja que baila entre las flores
porque sabe que otra brotará.

Un pájaro cantando en un reseco gajo,
alondra mía,
peregrino sinsonte de mi amor preñado,
cantando siempre, a pesar de todo,
y anidando en otro árbol
si el propio se ha derribado.

Hay un tocar de flautas,
brisa aprendida,
manejo de labios y lenguas
descifrando mis te quiero
en éste madrigal que escribo.

Raquel Rueda Bohórquez

Barranquilla, junio 18/15

RECUÉRDAME [28]



Miércoles, 13 de mayo de 2015


RECUÉRDAME [28]

Si por una coincidencia, me piensas ahora,
¿acaso no crees que también te esté pensando?
Mira amor mío, admira ese danzar de hojas
como alguna vez juntas lo hicimos.

¡Qué dulces se ven las mariposas cuando se tocan!
Antenitas van y vienen, besitos entre la brisa,
así, como ahora te estoy besando.

Jugamos a las hojas en remolino,
danzo y lanzas sobre mí tus suspiros
y en un abrazo como de luz sobre tus flores,
en un ir y venir como aroma,
te consuelo.

¿Para qué llorar ahora?
Digámonos un poema entre las dos,
te diré: gota de lluvia,
¿para qué mojas mi vestido blanco?
ayer tenía sed, pero ahora,
todo es como un manantial
fluye la vida, va y viene,
¡parece un carnaval!

Dime ahora,
¿por qué razón seguimos llorando?
reclamo un verso tuyo,
esa sonrisa que se alejó de tu boca
andar de gitanilla, contenta siempre:

¿Qué te pasa ahora?
Pero recuérdame tan solo,
que no se moje tu mundo,
deja que lluevan poemas nuestros
y cuando esté contigo,

cuando juntas de nuevo,
sabrás que jamás me he ido
que  toco tus manos,
y nos escribimos.

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, mayo 13/15