miércoles, 26 de febrero de 2014

RANITA

159. RANITA

24 de febrero de 2014 a la(s) 16:21
Publicado por RAQUEL en 11:53

Ranita se enamoró de nuevo,
Así veloz como un rayo sobre una hoja de loto.

Mientras la flor se oculta,
Inicia su tarea desde el amanecer,
Llenando de besos ardientes
Entibiando las frías mañanas,
Para regresar de nuevo al atardecer.

El ayer quedó en el olvido,
Sus muchachos se crecieron
Y ahora quiere nuevo nido
Pero será plantado en su corazón,
Con los alivios del tiempo y las caricias
Que no faltarán en su nuevo traje,
De éste último otoño que se previene.

Sus amadas flores esconden su belleza bajo el lodazal,
Como siempre lo han hecho
Pero su regalo será verlas abrir ante el maravilloso suspiro del sol
Desnudar su corazón
Y entregar el aliento que brota de él.

¡Qué bello es mi nuevo día! -dice Ranita-
Quisiera retornar a ese ayer, pero nada vuelve,
Sólo quedan los recuerdos...
No volverá mi rubio niño a llenar de cánticos mi laguna
Ni volverá mi vieja madre a entonar versos y alegrar mi vida...

Pero regresará  una primavera estoy segura...
Retornará  el invierno a mis ojos de nuevo
Y su amor, que no vence el tiempo estará aquí
Como un diamante fino tallado en mi alma.

¡Qué bello está mi día!... Tengo que sonreír de nuevo
Debo  tomar el atajo que presenta mi destino
Y saber que debo continuar sin ellos.

Ven a mis brazos amor...
De luz y de sueños...
Regresa que apremia el tiempo y no quiero saltar
Sin antes ver tus ojos negros, y cubrir mi frío con el tuyo
En una primavera esperada, sin el llanto del sauce,
Sin el deshoje del roble, sin el dolor que se renueva
Cuando el recuerdo llega.

Ranita saltó de nuevo...
Allá cerca del lago el cantar de un zorzal
Allá cerca de una roca, la respuesta de un mirlo
Más allá, sobre una pequeña rama... Una princesa...

Ha de ser el sinsonte de mi madre
Que inicia su día entonando plegarias
Por ese mañana  que vendrá,
 Y nos encontrará con los ojos abiertos,
Viendo a esa estrella final…
Con radiantes luces, invitando al descanso.

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, junio 1/13



Ranita está suspendida en locos sueños, no sabe si alguno es para ella, pero se queda en su flor de loto, esperando lo que el destino tenga guardado para ella... bueno o malo... ¿acaso somos adivinos?
Imagen: Internet
Ranita está suspendida en locos sueños, no sabe si alguno es para ella, pero se queda en su flor de loto, esperando lo que el destino tenga guardado para ella... bueno o malo... ¿acaso somos adivinos?

SOLO TÚ

SOLO TÚ

24 de febrero de 2014 a la(s) 23:00
Mi noche fue un día lleno de luz
Ya que al pensarte todo se iluminó
Todo sueño malo es esfumó
Cuando tus ojos a contraluz
Encendieron mi corazón.

Un motivo: pensar en ti
¿Acaso importa si te puedo tocar?
¿Acaso si te puedo tener?
Más atrapado vives en mis letras.

Un ramito de flores del campo
Una hoja seca que atrapas en el bosque
Valen más que muchos desaires,
Mientras pueda tomar tus perfumesn el aire…
Seré feliz. 

Aquí estoy de nuevo…
¡Si escucharas, el ruido de mi ahora!
Canarios colgados de gajos invisibles
La ilusión de un amor, un motivo para escribir…

Mi musa querida,
Mi poema fresco caminando por ahí a pesar del frío
Soñando tibieza, abrigado con los sueños
Sonriéndole a la vida entre flamas encendidas;
Viéndote, sólo eso, amándote en silencio. 

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, febrero 2/14


EL NIÑO

EL NIÑO

25 de febrero de 2014 a la(s) 0:20

Estuve en la misma roca
Donde el niño jugaba canicas
Las rodillas peladas
Parches en el pantalón...
Mirada verde como un olivar,
Olor a bicicleta… a balón…
Pegados escarlatas en su rostro herido...

Cerca de las rocas
Un ruido escuchaba…
Como si el fuego se apagara
Dentro de su ropa...

Gemidos aquéllos...
¿Es el canto del búho?
Sus hambres viejas
Me dejó al desnudo...

El chiquillo tosía un poco
Una guayaba en su mano izquierda
Porque en la derecha un crucifijo
Cortaba sus dedos fríos y desechos.

¿Qué hacía un niño solitario?
¿Quién pudo dañar así su piel?
Pero él como pudo se arrastró
Manaba su sangre cual revuelto río
Y alguien que pasaba...lo escuchó...

¿Qué hacía un niño sin quién lo cuidara?
Peligro que acecha en cada rincón
¿Zapaticos viejos de quién serán?
¡Del muchachito que acaban de cargar!

¡Qué triste recuerdo!
En Campo Hermoso claro
Por ahí pasaba un puente
Que se llenaba de cabezas,
Como si basura fuera el hombre
¡Me dio tanta tristeza!...

¿Y el muchachito?
Recuerdo que no pudo llegar
Se tornó blanco el rostro
Pero un nombre... exhaló al final
No era él... Habían muchos más...

¡Qué triste recuerdo!
Pero debo contar...
Para que los niños no salgan solos
Siempre vayan de la mano
De mamá o papá...

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, febrero 25/14

A TU OÍDO/A un amigo

A TU OÍDO/A un amigo

25 de febrero de 2014 a la(s) 10:50
Mientras corro para terminar mi trabajo de hoy, que no se queme nada, vigilante estoy… y presto atención al ruido de afuera, gritos, cantares, poesía, dolor, el mirlo que retornó y lo acabo de escuchar, muchos trinos diferentes que creí perdidos…

¿Qué haces avecilla tan herida y sin amor?... Bendito Dios que te acercó a mi ventana, para escuchar tu voz, qué genio eres, como trinas de hermoso, y regalas la obra de tu alma para que todos conozcan de tu interior…

Cuántas veces pasamos quejándonos de nuestros males, sin prestar oído a otros… creemos que somos los más sufridos, los que más penas tenemos… pero hoy mi oído me trajo sonidos, brisas que ayer me dolían, sensación de ahogo en el corazón que ante la lluvia de sus ojos dejó claro todo ese dolor guardado. 

Cuántas veces no permitimos un desnudo en una página, cuando el artista quiere plasmar su obra, y censuramos todo… pero sí aceptamos imágenes llenas de dolor y sangre, tan reales, que el día se daña, y la melancolía recurre como un demonio sobre nuestros ojos…

¡Saca de tu interior todo lo que tengas!… escribe, lee, bendice tu suerte y la mía, porque estamos aquí prestando oído a los ruidos externos… presta atención a ese sonido interior tuyo y deja tus palabras por ahí, ¿estás seguro de que no escribes bien?... todos podemos exteriorizar, contar, o no contar es cuestión personal, pero contando se pasa el tiempo, y aliviamos esa inmensa carga que tenemos dentro…

Mucho he sanado escribiendo, mucho, escuchando a otros… benditos todos los que prestan su oído, y los que tocan a tu puerta…que el Dios vivo en cada corazón nos despierte… imágenes horrorosas, son igual a un puñal clavado, pero tenemos la opción de pasar y leer poesía, escribir nuestros propios pensamientos, y darnos cuenta que hay muchas personas prestando oído a tu dolor, y que puedes expresar y salir,  desocupar tu alma, para que pueda elevarse a ese infinito azul, en cualquier instante, sin llevarse nada que estorbe en el camino.

¡Bendito mirlo que has trinado hoy en mi ventana!, nada dolerá, para Dios no hay imposibles, la oración de rodillas, la esperanza y el consuelo de muchos días llenos de luz y bondad, han tocado tu alma buena y mi ventana estará ahí abierta para escuchar y ser escuchada. 

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, febrero 25/14 


No te afanes si el dolor toca a tu puerta... todo pasará en un instante, cuando una invisible mano toque tu piel y vuelvas a sonreír y cantar sobre el alero de mi ventana.
No te afanes si el dolor toca a tu puerta... todo pasará en un instante, cuando una invisible mano toque tu piel y vuelvas a sonreír y cantar sobre el alero de mi ventana.

EN EL OCASO...

EN EL OCASO... (Mi hermano también es poeta)

26 de febrero de 2014 a la(s) 10:21
Hoy quiero ver bien
Pues mis ojitos me fallan,
Y aunque mi amor no me falta
Con ellos me siento bien.

El tiempo no perdona
Y más cuando uno trabaja
Pero si a mí no se me abona
Entonces pido la baja.

De luchas vive mi vida
Y escribo por un capricho
Si no quiere que yo decida,
La boca me huele a picho

Trabajo de sol a sol
Y espero aquí en el poniente
Al lado de mi gran amor
La vida muy de presente.

Y así culmina mi día
Me voy a cama tendida
La plata que yo tenía
Se gastó en mera comida.

Llegaron los carnavales…
La cosa está bien maluca
Y aparte de vendavales
Los negros comiendo cuca.

El diablo está que se baila
Los negros casi que en bola
Pa echarlos en una paila
Y asarlos de carambola.

El ojo está que se opera
En época de carnaval
La visión que a mí me espera
Pa llevármela al platanal

Pedro Leonardo Rueda Bohórquez
Barranquilla, febrero/14

TE QUIERO

TE QUIERO

26 de febrero de 2014 a la(s) 14:11
Muchos se fueron sin decirlo…
Y tampoco lo repetí…
A pesar de que el sentimiento era sincero
Mi padre que vino en sueños a darme un consuelo
Mi madre, que regresó con flores tristes
Y en su pequeña parcela 2x1,
Vio que brotaban hermosas rosas blancas…

Te quiero… porque estás en mí ahora
En mí ya, lleno de nostalgias y pesares
Pero me atrevo a repetirlo
Aunque no lo escuche de tus labios
Pues si no lo digo hoy…
Tal vez no haya un mañana.

Te quiero por ser estrella en el cielo
Por ser hoja pequeña y cálida
Llenando de alegría mis ojos
Cuando caes danzando
En mi pálida ventana…

Te quiero, porque eres parte de una historia
La tuya, la mía, el tiempo, nuestros instantes aquí
Pasajeras aves que no conocemos un destino
Pero abrimos las alas y repetimos: te quiero…

Hoy…mañana…  siempre…
Más allá de todo éste presente
Más lejos que mi futuro,
Más ardiente que éste verano: te quiero.

Te quiero por brisa fresca dentro de mis pulmones
Sol ardiente divino, cobijador
Por ser  la manta bordada en estrellas
Que me regaló mi declamador.

Y tanto por decir, ahora… te quiero…
Que no quiero cerrar los ojos de nuevo
Ni que otros los cierren sin repetirlo
Te quiero… te quiero… te quiero…

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, febrero 26/14


Te quiero... te quiero... te quiero... te quiero...
Te quiero... te quiero... te quiero... te quiero...

ALAS SUS MANOS/A Paco de Lucía


ALAS SUS MANOS/A Paco de Lucía

26 de febrero de 2014 a la(s) 11:23
No muere el músico ni el cantor... 
Su voz continúa en otras manos 
y en el legado que han dejado al mundo. 
Q.E.P.D.


Tenía, Paco de Lucía, alas en sus manos.
Su música nos hace volar al infinito
Donde él entona ahora para otros...

Tenía fuerza de amor que lo impulsaba
En cada nota presurosa de su guitarra amante,
Acariciada como ninguna mujer,
Tocada como ninguna cortesana…

Escucho con lágrimas en los ojos.
Se ha ido el gran músico...
Poemas mil entre el sonido mágico,
Luciérnagas encendidas en muchos ojos.
Palidecer no es morir,sus manos tienen alas…

Ha volado… ellas lo han impulsado
Un juego de niños fue esa mujer de madera.
Su talle precioso lo encantó y lo hizo vivir
Más que nada en su vida.

Y  su padre, entre sus brazos lo ha recibido.
Gran músico que dejó un suelo vacío,
Pero el cielo, seguro que sí,
Lo recibirá con aplausos,
Pues un águila que tocaba con sus alas
Retornó a su nido.

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, febrero 26/14