QUE
BRILLE EL DIAMANTE [114]
A
veces no comprendo el porqué del valor del oro,
vale
más que el acero, aunque éste tenga
templanza,
ha
de ser que a fuerza de luz, el oro es
más valioso.
A
veces no comprendo el porqué de un árbol más que otro
si
todos están por y para algo, en éste bello planeta.
Y
el hombre que todo cree saber, ¿que tanto se eleva?
Vale
más una joya cualquiera si llega la muerte,
aunque
muertos somos carne de cañón para una funeraria,
producimos
más dinero difuntos que vivos, es la verdad.
Mis
joyas han sido robadas,
ya
no me preocupa, ahora no…
Si
pudiera regresar las esmeraldas de mi madre
y borrar los diamantes que humedecieron sus
mejillas.
A
veces no comprendo lo incierto de la vida,
la
ambición tan desmedida y la falta de amor…
Ha
de ser que llegamos para ser tallados
y
en éste mundo de luces,
morir
es el regalo que nos hará brillar,
aunque
no tengamos valor…
Raquel
Rueda Bohórquez
Barranquilla,
noviembre 6/13