LA REINA DE MI CORAZÓN
Es tan linda, tan cálida…
Recuerdo su cabellera negra ondulada, tez blanca
Su mirada tan cautivadora y llena de amor por todo
Sus manos dotadas de caricias el don de la entrega en ellas
Y su figura, siempre como un globo lleno de vida a punto de estallar.
Así es ella… la más bella reina de mi corazón
Es como una flor siempre abierta… sin deshojar
Con esa sonrisa tibia sus palabras de aliento acertadas,
Sus regaños y consejos siempre a tiempo,
Con una lágrima aguantada y en su pecho una oración.
Mi reina llenó de cánticos su jardín…
Su espacio era para todos… sus poemas aún guardados
Alentaban aquéllos días inciertos en su camino…
¿La sabiduría de su viva quién la copiará?
¿Cuando la aurora nos sorprenda sin sus besos
Y la noche oscura la dibuje en el cielo luminoso
Y la luna cante con ella a los luceros de la mañana
Y en su voz quebrada ya no haya llanto…?
Mi madre hermosa, ramo siempre perfumado
Lámpara encendida donde su fuego interno no se apaga,
Mujer hacendosa…, tibio regazo consentidor,
Maestra de la vida, enseñando siempre lo mejor y más valioso
Siempre amando… siempre entregando… con una cálida sonrisa
Sin cansancio con sus rezos, sin fatiga en su corazón.
Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, abril 22/12
