jueves, 9 de febrero de 2012

UNA HIENA QUE SE CONVIRTIÓ EN BRUJA

La historia se inició por allá en lejanas tierras
la hiena salió de su redil... ¿se llama a eso redil?
mostró su fiereza y sus dientes de malvada
chilló y se reía con esas carcajadas heladas...

Se transformó de a poco en una pava gorda y negra
buscó una rama que parecía una escoba
trepó con sus zancas operadas...
y la noche se oscureció a la vez con ella.

Se convirtió luego en una lechuza,
pero no era de las buenas...
ésta devoraba el alimento de otros
se escondía en una imagen arrogante
pretendiendo ser mejor que otras aves...

Allí... a lo lejos...
alguien decidió que la transformaría en lo que era
una bruja puerca que le arrancaba sonrisas a las hienas...
y chilló toda la noche... hasta que la luna se ocultó...

Por ahí escuché su satánica risa...
se esconde y envía lanzas por la espalda...
mientras el buche de pava gorda y rellena
quedó en una bandeja
que hoy ni los buitres se comen.

¡jajajajajajajaja!... escuchen esa sonrisa diabólica
deambula en su escoba que se quebró con la brisa...

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, febrero 9/12

COMO LOBOS

COMO  LOBOS

 Lo vi cuando se paseaba con ella
Delante de mis ojos y los de mis niños
Observé su cruel mirada y desatino
Y señalados estaban por el cruel destino...

Los vi brindar con el alimento de mis hijos
la calidez de su hogar en otros brazos
se reían como hienas en el pantano
pero el león rugió entregando una señal.

Los vi de nuevo, el tiempo se acortaba
el sino de una mano levantada es implacable
no te burlarás de tu semilla plantada
no destrozarás sus simientes...
Y los miré de nuevo a los ojos
cuando con lánguidos aullidos
danzaban a la luna entre llamaradas.

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla/11

SOMBRAS OSCURAS


SOMBRAS OSCURAS

Que no me cerquen los demonios 
Aquéllos que nacieron para dañar
Que se aparten esas víboras...
Dos cabezas he soñado
Que me quieren devorar,
Pero es más grande la mano
Que los aparta de mí.

¡Corre!...  ¡corre!...
Escóndete en la selva dulce gacela
Que sus garras no te tocarán
Como el cedro a los sinsontes...
Dios te protegerá.

Son mis palabras fuertes
¿Quién me las regaló?
El castigo a quien nos daña
¿De dónde llegará?

Vuela, vuela lejos golondrina
Que sus garras no te alcanzarán
Es más gigante el cielo,
Que las sombras que vienen del mal.

Suena... Suena campanario...
Tañe... ¡Tañe corazón...!
Que no nos besen  los labios
Que urdieron la traición.

Raquel Rueda Bohórquez
Barranquilla, febrero 9/12